El regidor de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, conocido en toda Galicia por su particular sentido del humor y sus excentricidades, ha dado orden directa al servicio de protocolo de su concello de rechazar todas las solicitudes de bodas que pidan que cualquier concejal oficie la ceremonia, quedando esa labor limitada únicamente a su persona.
El alcalde quiere que las bodas que se celebren en el consistorio ourensano pasen todas por su mano y ha ordenado personalmente que se rechacen incluso las peticiones de los propios contrayentes si no es él la persona elegida para oficiar los actos.
En los ayuntamientos españoles es habitual que las bodas las oficien los alcaldes o alcaldesas, ya que están acreditados para hacerlo, pero a petición de los contrayentes o por problemas de agenda, cualquier otro edil puede oficiar un matrimonio civil.
En todos menos en el de Ourense, donde Jácome ha dado orden expresa de vetar las celebraciones de matrimonios civiles que oficien otras personas que no sean el mismísimo alcalde.
Según explica el diario La Región, ayer mismo desde Protocolo confirmaban al concejal de BNG Luis Seara que “se cancelaba la boda que tendría que oficiar en el mes de junio”, y él mismo recibía un mensaje de los novios lamentando la situación, que publicó en la red social X, indicando que se trata de "una pataleta del alcalde".
Cuenta la prensa que el propio alcalde comprobó que “muchos ciudadanos optar por pedir que los casen otros concejales y no él” y que ha decidido prohibirlo totalmente.
“Solo delegaremos en algún concejal cuando el grupo de gobierno considere hacerlo”, ha dicho el regidor, quien argumenta su decisión basándose en “discrepancias” que mantiene “con la forma de dirigir estos eventos”.
Las reacciones no se han hecho esperar. Desde el BNG el concejal Luis Seara lamenta que los contrayentes no puedan elegir quién los case y explica que se hace porque “Jácome quiere todo el protagonismo para él”. Seara niega categóricamente que se haga nada fuera de lo común en las bodas que ofician los concejales.
Desde el PSOE por su parte, critican que Jácome “imponga la dictadura en las bodas” y le acusan de mostrar una “actitud infantil propia de un pequeño dictador cutre”.
Según los socialistas, es un ejemplo más de “las incongruencias, el infantilismo y el cutrerío en el que Jácome ha convertido la institución municipal”.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.