El hombre que fue detenido este lunes en la localidad pontevedresa de Tui por robar un vehículo con un niño de dos años dentro había quedado en libertad provisional tan solo unas horas antes, por haber quebrantado una orden de alejamiento que tenía en vigor por un delito de violencia en el ámbito familiar.
El arrestado es un hombre de 53 años vecino del municipio y viejo conocido de los agentes del orden, que cuenta con un amplio historial delictivo por robos, lesiones, tráfico de drogas y por conducir sin permiso tras haber perdido todos los puntos.
A estos delitos se les suma ahora el hurto de un vehículo y la detención ilegal de un menor, una acción que llevó a la madre del niño a entrar en pánico.
La rápida actuación de las fuerzas de seguridad y la colaboración ciudadana permitieron localizar al pequeño y detener a su raptor, que ha sido trasladado a los calabozos del juzgado y pasará próximamente a disposición judicial.
Los hechos ocurrieron a las cuatro y cuarto de la tarde, cuando la madre acudió al colegio a recoger a otro de sus hijos. Como hacía otras veces, aparcó frente al centro y dejó el vehículo abierto con las llaves puestas, pero bastarían unos segundos para que el delincuente, aprovechando la ausencia de la progenitora, se metiese dentro del coche y se diese a la fuga con el menor de dos años en el interior.
Inmediatamente se dio la voz de alarma y se desplegó un dispositivo policial que llegó hasta la zona fronteriza, para evitar que el delincuente huyera hacia Portugal.
Sobre las seis menos cuarto de la tarde, en la zona de la Veiga do Louro, a aproximadamente un kilómetro del colegio del que había sido sustraído, la Policía Local de Tui interceptó el vehículo y rescató al niño, que fue trasladado al centro de salud para verificar que no había sufrido ningún daño.
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