Los primeros casos de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) de España se dieron en el sur de Andalucía, en el año 2022, y en este tiempo se ha ido expandiendo por prácticamente todo el territorio nacional de forma muy rápida, llegando a Galicia hace poco más de un mes.
El aviso de una res muerta en Vila de Cruces, Pontevedra, y la detección de varios casos más con sintomatología muy similar en este municipio y en el vecino de Silleda, hacen sospechar que se trata del noveno foco de la conocida como “covid de las vacas” en la comunidad.
Los resultados que arrojen las muestras extraídas de estos animales, que se están analizando en los laboratorios, serán los que despejen todas las dudas, aunque los síntomas ya hacen sospechar a los especialistas que se trata de la peligrosa hemorragia epizoótica, que puede llevar a la muerte a las reses.
El diario local Faro de Vigo ha contactado con dos de los ganaderos afectados por esta enfermedad que se contagia a través de la picadura de un mosquito. Se trata de José Pallares, de la parroquia cruceña de Sabrexo y Javier Cea, propietario de una explotación en la vecina parroquia de Bodaño. Ambos tienen reses con la boca llena de llagas y salivación, y algunos ejemplares afectados presentan descamación del hocico, cojera y eritema en la ubre.
El cuadro en el ganado vacuno, según el veterinario que atendió a estos animales, presenta clínica moderada con fiebre, anorexia, edema facial (básicamente conjuntival), descarga ocular y/o nasal, salivación, disnea, eritema o descamación del hocico, cojera y eritema de la ubre. Se trata, dice, de una enfermedad de declaración obligatoria que “en los bovinos puede ser grave o resultar mortal”.
De confirmarse este foco, sería el noveno en Galicia y el primero en la provincia de Pontevedra.