Una empresa gallega lleva tres años trabajando 36 horas semanales: “El secreto está en organizarse bien”

El PSOE y Sumar, en su objetivo común de llegar al pleno empleo en España, han alcanzado un acuerdo en materia laboral que pasa por la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas sin tocar los salarios, entre otras medidas. Esa rebaja es un compromiso ya firme en caso de llegar a gobernar en coalición y en Informativos Telecinco hemos hablado con una empresa que lleva tres años con una jornada de 36 horas y nos ha desvelado sus ventajas.

La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, propuso ya desde un primer momento reducir la jornada actual de 40 horas semanales a 37,5 horas en 2024, lo que se traduce en media hora menos de trabajo al día.

Daniel Magaz es el gerente de Toldos Porriño, una empresa gallega que lleva ya tres años con una jornada de 36 horas semanales implantada. El secreto, dice, “está en organizarse bien”. Los empleados trabajan 4 días a la semana,  9 horas cada día, y aunque su convenio es de 40 horas, Magaz asegura que prefiere “no crecer tanto económicamente y ganar en calidad y felicidad en el trabajo”.

Trabajar 36 horas en lugar de 40 beneficia a empresarios y trabajadores

Magaz asegura que “la felicidad de los trabajadores repercute de manera positiva en su rendimiento”.

Según este empresario, que en estos tres años no ha visto menguar los beneficios de su empresa, “los empleados están más motivados” y en 36 horas semanales realizan las mismas tareas que antes en 40.

En este caso concreto los trabajadores van rotando sus turnos de manera que todos libran el fin de semana y un día de semana a mayores, lo que les permite conciliar mejor con sus familias y llevar a cabo gestiones o tareas que de otra manera les resultaría muy complicado.

El resultado de esta ecuación beneficia a todos: la empresa mantiene sus ingresos anuales y los trabajadores, que aseguran que “una hora más al día no se nota tanto”, acuden más motivados y felices a sus puestos de trabajo.