No es una novedad que en nuestro país las muertes superan a los nacimientos y la pirámide poblacional tiene la base cada vez más estrecha debido al bajo índice de crecimiento natural. La situación gallega no escapa de la que se vive en el resto de España, y cada vez vemos menos carritos de bebé por las calles de esta comunidad.
Por contra, lo que no deja de crecer en Galicia son los perros registrados en el Rexistro Galego de Identificación de Animais de Compañía (Regiac), que en sólo tres años se ha incrementado en un 53 %, pasando de 470.468 a la cifra actual de 720.555.
De hecho, según publica el diario local El Correo Gallego, el número de canes registrados en la comunidad “excede al de ciudadanos gallegos con una edad no superior a los 30 años”, que asciende 649.884 personas, según datos del Ministerio de Sanidad de este año.
En abril de 2020 en los ficheros del Regiac estaban catalogados un total de 470.468, o, lo que es lo mismo, había un perro por cada 5,7 personas en la comunidad. La proporción es que actualmente en Galicia hay un perro censado por cada 3,7 ciudadanos, y la dispersión geográfica muestra que esto responde en mayor medida al ámbito urbano, sobre todo a los grandes núcleos de A Coruña y Pontevedra.
Esta cifra, ya de por sí reveladora, se incrementará aun más con la entrada en vigor de la nueva Ley de Bienestar Animal, cuando sea obligatorio el seguro de perros, pues obligará a poner chip (con el consiguiente registro en el Regiac) de todos los animales de compañía existentes en la comunidad, que sobre todo en el ámbito rural son incontables.