La historia del menor de 15 años que fue detenido por apuñalar a un joven en Bilbao hace un par de meses ha dado un giro importante. En estos momentos, su madre adoptiva quiere demostrar que lo hizo su hijo fue en defensa propia puesto que fue retenido y agredido por una banda juvenil, informa M. Larrinaga, E. Gómez y S. Guzmán.
La familia del menor ha guardado unos vídeos donde se puede apreciar cómo le agreden para usarlo como prueba para denunciar el calvario que padeció tras ser captado por una banda juvenil. La madre del menor ha explicado que la sensación que ha tenido al ver esas imágenes es de que "era algún tipo de prueba o ritual para entrar o pertenecer a un grupo".
El menor, de origen etíope, fue adoptado con nueve meses y debido a que era un niño difícil, lo tuvieron que mandar a un piso tutelado. Allí, terminó escapándose y se fue a vivir a una lonja abandonada con los que, en ese momento, creía que eran sus amigos. Pasó dos semanas infernales, así lo explica el abogado de la familia del menor, José Montero, ya que "lo secuestran, lo torturan, lo atan de pies y manos con una brida".
Sus padres contaron que encontraron a su hijo y se lo llevaron a casa, pero que ahí comenzaron las pesadillas. Las malas compañías volvieron a buscarle y le tendieron una emboscada y acabó apuñalando a uno de sus agresores. Así pues, en la querella que han presentado en el juzgado intentan demostrar que el menor fue, en realidad, la víctima.
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