Condenan a un colegio de Bilbao por el infierno que vivió una niña de cinco años acosada por otra: "Llegó a perder el habla"

  • El fallo considera que el colegio no hizo lo suficiente para parar el acoso al que estaba siendo sometida

  • Durante seis meses otra niña de seis años la sometió a agresiones físicas y sexuales

  • La niña perdió temporalmente el habla y tuvo que tomar ansiolíticos

No es la primera vez que un colegio es condenado por no actuar en casos de acoso escolar, aunque nunca hasta ahora, la indemnización reclamada ha sido tan alta como la impuesta a un centro escolar de Bilbao. "Es pionera", apunta Jorge Romero, abogado de la familia.

El colegio, en cuestión, deberá pagar 40.000 euros a la familia de una alumna de 5 años, por el bullying al que fue sometida durante seis meses por parte de otra menor. Los casos de bullying en España van en aumento: el 25 % de alumnos afirma haber sido acosado, según un estudio.

El Juzgado de primera instancia número 8 de Bilbao ha condenado al colegio concertado Nuestra Señora de Begoña, del barrio de Santutxu, a pagar 40.000 euros a la familia de la pequeña. La sentencia, contra la que cabe recurso, concluye que el colegio no hizo lo suficiente para evitar el acoso.

"Estamos hablando de una niña sobre la que un informe psiquiátrico declara que no ha visto un caso de tanta gravedad en su vida profesional", insiste el letrado, recordando que "llegó a perder el habla", por lo que estaba viviendo en la escuela.

La víctima cursaba tercero de Infantil cuando otra niña, solo un año mayor, comenzó a empujarla por las escaleras, a golpearla, tirarle del pelo o quitarle la comida.

Incluso, según el fallo, en ocasiones "le introdujo rotuladores en la vagina”. El acoso fue "continuado, persistente e ininterrumpido", entre septiembre de 2021 y marzo de 2022.

Ansiolíticos con 5 años

El abogado de la familia recuerda, aún sobrecogido, como la niña llegó a perder el habla durante meses ante el padecimiento que estaba sufriendo, amén de otras secuelas que la llevaron a tener que ser medicada con ansiolíticos, y a dos años después, seguir recibiendo tratamiento psiquiátrico.

La familia alertó de lo que estaba pasando al colegio en varias ocasiones y pidió que separaran a su hija de la otra niña, cosa que nunca se hizo. A pesar de que el centro asegura que tomó cartas en el asunto, la justicia determina que "no se activaron los protocolos y las medidas a las que el centro docente estaba obligado", explica el abogado de la familia y, en consecuencia, "existieron unos meses de acoso continuado, persistente e ininterrumpido".

El colegio defiende que se realizaron reuniones con las familias y se abrió un protocolo de observación. Pese a todo, la justicia reprocha la inacción del centro bilbaíno ante el "acoso continuado", al que estaba siendo sometida una de sus alumnas, de solo cinco años.

La familia de la víctima, tras estos dos años de periplo judicial, ha pasado por diferentes estados de ánimo, según relata su abogado. Al principio, llegaron desanimados, el día del juicio fue "muy duro" al recordar aquellos episodios que vivió su hija y, hoy en día, están "satisfechos", porque la justicia les haya dado la razón. La niña, que cambió de colegio, continúa en tratamiento dos años después. La madre de la pequeña, durante el proceso, insistía en que con este proceso quería que algo así no volviera a ocurrir.

Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.