“Ninguna persona ha resultado herida”, informaba la Ertzaintza en una nota de prensa en relación con el tiroteo que se produjo la noche del martes en Basauri. Esa era la única buena noticia de un suceso tan insólito como peligroso.
Tres hombres fueron detenidos en relación con los disparos efectuados con arma de fuego desde la ventana de una vivienda del barrio de Urbi. Hasta ahí, lo que se sabía por ahora.
Según publica El Correo, una supuesta infidelidad en un matrimonio pudo ser el origen de una pelea entre las mujeres de dos familias diferentes. Fruto de la refriega, una de las mujeres sufrió lesiones y acudió, junto a otros familiares, hasta el barrio de Urbi donde reside el otro clan familiar. Allí, el enfrentamiento fue subiendo de temperatura.
Mientras la riña continuaba en una amplia explanada, en la calle. Un hombre comenzó a disparar desde la ventana de una de las viviendas y los proyectiles impactaron, al menos, en la carrocería de dos vehículos. Tras el tiroteo, el hombre se deshizo del arma lanzándola por la ventana.
La Ertzaintza detuvo a tres hombres de 36, 31 y 25 años de edad, acusados de un intento de homicidio. Durante el operativo, los agentes que entraron de forma autorizada y controlada en el inmueble, recogieron evidencias y casquillos dentro y fuera del piso. Pruebas que analiza ahora la Policía Científica. La investigación trata de determinar quién fue el autor material de los disparos. Tres de las mujeres implicadas en los hechos han interpuesto denuncias por intento de homicidio.
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