Una empresa de Vitoria desarrolla el primer test en el mundo para medir la ciberseguridad de un vehículo

El sector de la automoción ha cambiado mucho en las últimas décadas y, en la actualidad, los vehículos que salen al mercado son más parecidos a ordenadores sobre ruedas que a los viejos Opel Cadet o Renault 5. Eso facilita la conducción a los usuarios, pero si no están debidamente protegidos, también les expone a los ataques de los ciberdelincuentes. De ahí, la importancia de que además de que los vehículos sean cada vez menos contaminantes, también sean más ciberseguros. “Si todos los componentes no están conectados, pueden ser la puerta de entrada de los malos”, explica Azucena Hernández Palmero, CEO Eurocybcar.

Precisamente, este laboratorio vasco lleva años desarrollando una metodología para medir y certificar el nivel de seguridad del coche. Un test que está, en puertas de la entrada en vigor de la nueva normativa europea sobre ciberseguridad en los vehículos, a la espera de recibir la patente internacional, y que cuenta con las “únicas máquinas del mundo capaces de decir si el vehículo analizado cumple con la normativa de forma estandarizada”. En concreto, son tres tipos de máquinas distintas.

El novedoso sistema de esta empresa de Vitoria se realiza tres tipos de pruebas: sistemas conectados al vehículo de forma física, los conectados de forma remota y a los que se accede a través de aplicaciones. “Uno mismo puede atentar simplemente cargando el móvil, si no es ciberseguro y tienes un virus en el teléfono puedes trasmitirlo y provocar que se pare el motor en marcha”, puntualiza Azucena Hernández.

Pero, y ¿qué puede hacer un hacker en nuestro coche? Pues, “podría atentar contra nuestra propia vida, accediendo a los frenos, al acelerador, al GPS o al Air Bag”, explica Azucena Hernández. De ahí, la relevancia de que los sistemas de seguridad del vehículo estén ciberprotegidos para que “un ciberdelincuente pueda robarnos información personal o modificar los parámetros de nuestro coche para frenarlo, acelerarlo o, incluso, tomar el control de forma remota”.

Suena a ciencia ficción, pero la fundadora y CEO de Eurocybcar recuerda el caso de un hombre en Australia que se descargó una aplicación y a través de ella controlaba en todo momento a su expareja: “Sabía donde estaba su ex, le activaba los frenos del coche o le bajaba las ventanillas, ella acudió a la policía pensando que su coche se había vuelto loco cuando, en realidad, estaba siendo ciberacosada por su exnovio”, a través del coche.

La situación es de tal importancia que a partir del próximo 6 de julio, no se podrán vender en Europa vehículos que no cumplan la normativa que exige que todos, salvo las motos, incluyan un sistema de gestión de ciberseguridad que les aporte seguridad frente a 70 amenazas diferentes.

La nueva normativa (UNECE/R155-), implantada por la Unión Europea, según la cual todos los vehículos que se vendan en Europa a partir del 6 de julio de 2024 deberán incluir un sistema de gestión de ciberseguridad, es “tan completa” que, en palabras de Hernández, “se ha anticipado a su tiempo e incluye requisitos que ahora mismo los coches no incorporan esa tecnología”. Sin embargo, la nueva norma se deja fuera las motos.

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