A finales de 2023, las chinches apestosas tomaron la localidad de Barakaldo en Vizcaya y se cebaron con el barrio de Cruces, la misma zona de la ciudad que ahora sufre la presencia de otra desagradable plaga: las cucarachas. El Ayuntamiento les hace frente, desde hace días, con insecticida e intervenciones cada vez más intensivas, ante las quejas vecinales por tener que convivir con estos desagradables insectos.

El verano es sinónimo de buen tiempo, vacaciones, playa y, en este municipio, empieza a serlo de cucarachas. Sí, porque a estos insectos les gusta la época estival para hacer su aparición, tal y como reconocen varios vecinos, que cada año son testigos de cómo cuando suben las temperaturas, aparecen las cucarachas. Una visita que se repite y que desagrada, pero que este año ha tornado en preocupación ante la numerosa presencias de estos insectos de antenas largas y cuerpo de unos 3,5 centímetros de largo.

La mayor parte de las veces las cucarachas, que son extremadamente hábiles para esconderse, se dejan ver por las noches y su presencia está siendo especialmente elevada en algunas zonas de la ciudad como son los barrios de Cruces, Urban, San Vicente y Arteagabeitia. Las cucarachas no tienen un hábitat natural concreto, pueden vivir en diferentes ecosistemas y regiones del mundo, aunque a estas parece haberles gustado Barakaldo.

Los ciudadanos que residen en estas zonas aseguran que es fácil encontrarse con ellas por las calles cuando cae la noche, aunque cada vez son más los que afirman haberse topado con alguna dentro de sus propias casas.

Este año se da además la circunstancia de que, la plaga de cucarachas ha hecho acto de presencia antes de lo habitual. El Ayuntamiento de esta localidad vizcaína ya ha tomado cartas en el asunto y realizado algunas intervenciones que, tras su escaso éxito, han sido sustituidas por operativos más intensivos con el objetivo de erradicar a estos molestos bichos.

Las cucarachas tienen la rara habilidad de hacer que las personas se pongan de acuerdo, ya que la mayoría siente una especie de ‘repelús’ cuando oye hablar de ellas, pero sobre todo son hábiles a la hora de esconderse. Tanto que, según National Geographic, un estudio liderado por Changlu Wang en 2018 concluyó que el 35% de los residentes desconocían que convivían con cucarachas en sus casas. Los expertos apuntan a que ese 'repelús' o miedo está más que justificado si tenemos en cuenta que transmiten enfermedades como la salmonelosis o la gastroenteritis

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