La víctima de un robo en Zalla pega una paliza a los ladrones y acaba denunciado
Los residentes de una vivienda en el barrio de Aranguren, en Zalla, han estado causando multitud de problemas a los vecinos
Uno de los vecinos sufrió un robo en una de sus lonjas y se presentó armado en la vivienda de los presuntos ladrones
El hombre, acompañado de un familiar, pegó una paliza a los presuntos ladrones, quienes le denunciaron por allanamiento de morada y lesiones
Un vecino de Zalla (Vizcaya), que recientemente fue víctima de un robo, se enfrenta a acusaciones de odio, allanamiento de morada y lesiones tras sorprender a los presuntos ladrones con su bicicleta y otros objetos robados.
Todo ocurrió en el barrio de Aranguren, en Zalla, donde los residentes de una vivienda han estado causando multitud de problemas a los vecinos durante los últimos meses.
MÁS
Los ruidos insoportables durante la noche, los excrementos de perro en los balcones, la basura y los deshechos en los pasillos y las conexiones ilegales a la electricidad de la comunidad son parte del día a día para los vecinos. Sin embargo, lo que más les preocupa es el constante aumento de robos, amenazas, agresiones y tráfico de drogas.
Robos y ataques, parte del día a día
Un claro ejemplo fue el ataque que sufrió un vecino del barrio con una porra extensible y con gas pimienta para poder ser robado.
Pero el último robo, el que sufrió un hombre en una lonja de su propiedad, fue la gota que colmó el vaso. Los ladrones se llevaron una bicicleta valorada en más de 5000 euros, y varias de sus herramientas laborales, entre otras cosas de gran valor.
El hombre rápidamente descubrió quiénes podrían estar detrás del delito. Armado con una maza y acompañado por un familiar, se presentó en la vivienda de los presuntos ladrones y comenzó a golpear la puerta hasta que pudo abrirla. En el interior de la vivienda encontraron a uno de los ocupantes, que fue sacado a golpes para posteriormente recibir una paliza que le llevó a estar varios días ingresado en el hospital.
Se encontró la bicicleta
En otro local, el hombre y su familiar se encontraron a los otros dos presuntos ladrones, que afirmaron no tener nada que ver con el robo. Sin embargo, la bicicleta y otros objetos robados estaban escondidos en ese mismo local.
Finalmente, tras los continuados golpes, acabaron admitiendo que sólo habían recibido los objetos, pero que no eran conscientes de que habían sido robados. Estas tres personas han denunciado al vecino acusándolo de allanamiento de morada, de un delito de odio y de provocarles lesiones.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.