Euskadi, la comunidad con más empleados a tiempo parcial, la mayoría mujeres: Sofía y María trabajan 10 y 6 horas a la semana

María y Sofía son dos de las 119.000 mujeres vascas empleadas solo durante unas horas a la semana. Son trabajadoras a tiempo parcial, una modalidad de contratación en la que de nuevo precariedad y mujeres van de la mano. Euskadi tiene el dudoso honor de ser la comunidad autónoma con más empleo a tiempo parcial, con casi 156.000 vascos ocupados de esta manera. De ellos, solo 36.650 son hombres. Con sueldos ínfimos, las posibilidades de estos trabajadores de estabilizar sus vidas e independizarse son escasas.

A sus 26 años, la bilbaína María Godoy trabaja como socorrista en un polideportivo de Bilbao, pero su jornada está lejos de las 40 horas semanales: “Soy fija, pero trabajo solo seis horas y cuarto, los fines de semana”. Comenzó allí mientras cursaba la carrera y “entonces, estaba contenta porque esa jornada me permitía compatibilizar el trabajo con los estudios”. Sin embargo, tras terminar sus estudios pidió que le ampliaran las horas y la respuesta fue, no. Han pasado cinco años.

María sigue viviendo en casa de sus padres y tiene la sensación de “seguir siempre igual”. Como cualquier joven de su edad, sueña con independizarse y encontrar un trabajo fijo que le dé estabilidad y me permita “no estar todo el día de un lado para otro”. María sigue formándose y en la actualidad cursa un máster, además trabaja de manera esporádica como camarera en el Guggenheim y los fines de semana, vuelve a su trabajo a tiempo parcial como socorrista en el polideportivo de San Mamés.

El sueño de independizarse y aspirar a un contrato fijo

Un 'ir y venir' que, por el momento, le impide “encauzar su vida” y lograr la estabilidad suficiente para poder independizarse. “Para eso necesitas un trabajo fijo”, resume. El suyo lo es, pero con “muy pocas horas a la semana” y, por si eso no fuera suficiente, “ni siquiera me han concedido un cambio de polideportivo que solicité porque en el que estoy me pilla muy lejos”.

Entre los jóvenes, no es raro encontrar a quienes compaginan sus estudios con un trabajo a tiempo parcial que les permite ganar algo de dinero mientras siguen con su formación académica. Es el caso de Sofía Gaete, una estudiante vasca de Publicidad y Relaciones Públicas en la UPV/EHU, que a la semana trabaja en un bar de su pueblo, Llodio (Álava). “Empecé a trabajar para pagarme el carnet de conducir porque suspendí y no quería que mis padres tuvieran que volver a pagármelo”, recuerda. Hoy en día, Sofía ya dispone de permiso de conducir, pero sigue trabajando “para mis gastos”.

En su entorno, todos los que trabajan lo hacen, al igual que ella, a tiempo parcial. Su jornada de 10 horas semanales se la toma “como algo temporal, que me permite ganar algo de dinero y estudiar a la vez”. Pero su sueño no es seguir toda la vida trabajando “tres horas los lunes, tres los martes, tres los miércoles o cuatro horas el sábado y otras cuatro el domingo”. No, “cuando termine de estudiar querría un curro de jornada completa en algo relacionado con lo mío”, concluye.

Mientras la tendencia a nivel nacional es que hayan caído el número de contrataciones a tiempo parcial, pasando del 13,6 al 13,3%, en la Comunidad Autónoma Vasca, un informe del Grupo Adecco, indica que los empleados durante solo unas horas a la semana crecieron. Así, en 2023 se contabilizaron 155.675 ocupados a tiempo parcial, es decir, 5.775 trabajadores más con este tipo de empleos que un año antes.

Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.