Luto en el municipio guipuzcoano de Orio, donde Urko Pikabea, un menor de solo 12 años, ha muerto de forma repentina en su domicilio instantes antes de que acudiese al entrenamiento de fútbol del equipo en el que militaba, el infantil del Orioko.
A la espera de que se practique la autopsia para definir las causas de su súbito fallecimiento, este viernes está previsto que se celebre su funeral en la iglesia parroquial de San Nicolás de Bari, tal como avanza El Diario Vasco.
El pequeño, que además este viernes iba a cumplir 13 años, iba a disputar un torneo de fútbol organizado por la Real Sociedad en el campo de Mendibeltz este mismo miércoles, pero fue suspendido nada más conocerse lo sucedido.
Desde las redes sociales, el propio club de la Real Sociedad ha expresado su pésame trasladando sus condolencias a la familia y sus allegados.
“Nos unimos al dolor por el fallecimiento de Urko Pikabea, infantil del Orioko. Nuestro pésame a familiares y amigos y al club. Goian bego”, escribían, haciéndose equipo del comunicado emitido también por la Federación Guipuzcoano de Fútbol.
Del mismo modo, también desde el Athletic Club se han pronunciado desde las redes sociales para mostrar sus condolencias: “Nuestro más sentido pésame para la familia y allegados de Urko Pikabea, jugador infantil del Orioko F.T, que falleció en el día de ayer”, señalaban.
Tras lo sucedido, el equipo del pequeño ha declarado tres días de luto.
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