Un joven ha sido detenido en Bilbao (Bizkaia) este sábado 30 de diciembre después de agredir a otro. Le estuvo pateando en la cabeza, mientras la víctima se encontraba tirada en el suelo.
Gracias a la ayuda de un agente de la Ertzaintza fuera de servicio, que actuó igual que el policía que evitó una violación en Madrid, la paliza no fue más grave de lo que ya estaba siendo.
Porque, según ha detallado el propio departamento vasco de seguridad, el chico podría tener una fractura de mandíbula y varios dientes rotos. Todo esto debido a las patadas que le propinaba el agresor.
El suceso ocurrió a las 6:30 horas de la madrugada, en la plaza Miguel de Unamuno. El ertzaina escuchó primero los gritos de la víctima y después observó el ataque. Inmediatamente intervino.
Justo en ese momento también circulaba por la zona una patrulla de la Policía Municipal de Bilbao. Los agentes actuaron para controlar la situación igualmente. Aunque el joven de la agresión trató de huir.
Se dirigió a una boca de Metro cercana, pero fue interceptado por otro vehículo policial. En cuanto a la víctima, fue trasladada al hospital en ambulancia para ser atendida.
Al arrestado se le acusa de un delito de lesiones y pasará a disposición del Juzgado de Guardia para que decida su futuro.
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