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Los menús escolares en los comedores de algunos centros educativos vascos empiezan a estar conformados, con más asiduidad de la deseada, por platos de pesadilla. Desde la pasta aderezada con larvas, a los filetes de ternera ácidos en salsa, pasando por los gorgojos en las alubias y ahora, llega la última propuesta a un instituto alavés, una menestra de verduras con insectos. Y todo, en menos de dos meses desde que arrancara el curso escolar.
En esta ocasión, ha sido el Instituto de Secundaria de Murgia (Álava) el que ha retirado del servicio la menestra al detectar la presencia de pequeños insectos, al menos en una de las cazuelas.
Ocurrió este mismo martes y tras hallar los “bichitos”, el centro comunicó la incidencia a las familias de los alumnos, así como al Gobierno vasco, aunque desde el Departamento de Educación han asegurado a El Correo, que no tienen conocimiento oficial de ninguna incidencia en Murgia.
De nuevo, tras la elaboración de estas recetas está la empresa Serunion que prepara, desde sus cocinas centrales de Logroño, los menús para algunos centros escolares públicos vascos. Entre ellos, la ikastola Ikasbidea de Durana que fue la primera en denunciar a finales del pasado septiembre la presencia de microorganismos en la pasta que iban a comer los alumnos que hacen uno del servicio de comedor. Más tarde en este mismo centro los responsables del ‘jantoki’ decidieron que los alumnos comieran solo un plato de sopa ante el “sospechoso” sabor del segundo plato que debería haberse servido junto a la sopa y que constaba de filetes de ternera en salsa que “tenían un sabor ácido”.
“No sabemos lo que están comiendo nuestros hijos”, se quejaban desde la Ampa de Ikasbidea y reclamaban la rescisión del contrato con Serunión. Tras lo ocurrido en Durana, el Gobierno vasco solventó inicialmente el asunto con una sanción económica a la empresa encargada del servicio por una “infracción grave”. “La multa a esa empresa le hace cosquillas”, protestaban las familias.
Que la comida se elabore en otra Comunidad Autónoma y que, a diario, sea transportada durante muchos kilómetros hasta los distintos centros escolares del País Vasco ya provocaba los recelos de algunas familias que preferirían, por ejemplo, un modelo de cocinas en los propios centros escolares. Sin embargo, desde el punto de vista de seguridad alimentaria, "es más seguro el modelo actual" porque "las siete cocinas centrales donde se preparan los menús para los colegios vascos están super controladas y la comida se sirve caliente", aseguraba a Informativos Telecinco Amaia de Ariño, directora técnica de Elika, la fundación vasca para la Seguridad Agroalimentaria.
En cualquier caso, el pasado 14 de noviembre el Ejecutivo vasco anunció que se iniciaban los trámites para la rescisión del contrato a esta empresa de catering en la ikastola Ikasbidea de Durana, el Instituto de Murgia y el CEIP Gorbeia Eskola de Zigoitia. Por cierto, que tras el incidente con la menestra uno de los responsables de la firma de catering se presentó en Murgia.
Serunion seguirá, eso sí, preparando la comida para otros colegios vascos como la ikastola Langile de Hernani que, recientemente, denunció que había detectado gorgojos en los platos de alubias que debían servirse a los 400 alumnos del centro, que decidieron protestar negándose a comer y llevando bocadillos de casa.
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