El Bosque de Oma de Ibarrola abrirá en octubre pero se podrá visitar mientras pintan 19 árboles

En la segunda y definitiva fase del pintado del nuevo Bosque de Oma de Agustín Ibarrola, se actuará en los 19 conjuntos artísticos que faltan.

Una vez concluido el pintado, el recinto se abrirá al público en octubre. Sin embargo, los que estén interesados en observar los trabajos que se están realizando, lo podrán hacer a través de una cita previa. Una vez finalizados los trabajos, el recinto contará con más de 800 arboles y un kilometro de recorrido.

El nuevo Bosque estará "más cuidado y será sostenible" ya que el tratamiento y cuidados periódicos que se darán son más adecuados al ritmo biológico, se respeta la vegetación original y se evitan tareas que puedan afectar a su biotipo vegetal.

Al mismo tiempo, se controlará el estado de cada uno de los árboles con la monitorización individualizada en cada uno de ellos y se activará un sistema de seguridad para actuar en caso de incendio o para reaccionar ante situaciones de emergencia.

Además, para que las personas que lo visiten tengan una experiencia más agradable los caminos se están acondicionando con un sustrato ecológico formado por cortezas de pino y ciprés trituradas y se crearán zonas de descanso en el recorrido.

Igualmente se indicarán los puntos donde las personas visitantes deberán colocarse para poder apreciar debidamente cada conjunto artístico.

El Bosque contará con conectividad, lo que facilitará la utilización de recursos para hacer llegar a las personas que lo visiten referencias al artista o información para contextualizar la obra.

La familia Ibarrola, satisfecha

El nuevo recinto ubicado en el municipio vizcaíno de Kortezubi está localizado en la parcela contigua al actual.  

Durante el anuncio de apertura, el profesor de la UPV-EHU Fernando Bazeta ha explicado que en proceso de cambio de lugar "lo que es importante es trasladar los conceptos emocionales", como "las preguntas que Agustín Ibarrola se debió hacer cuando estaba pintándolo y las respuestas que encontró", porque el "bosque está vivo y las pinturas entre ellas tienen que dialogar".

Por su parte, el hijo del artista, José Ibarrola, ha destacado que para la familia es una "gran satisfacción que el Bosque se recupere porque estaba mal y después de este año todavía peor, y ver que va a tener una larga vida, espero, es una gran satisfacción".

Ibarrola se ha alegrado también de que se recuperen sobre todo tres conjuntos que habían sido talados a finales de los 80, porque eran conjuntos "muy significativos, no solamente desde el punto de vista conceptual con respecto a la obra de Agustín" sino también porque eran fruto de "una reflexión de alguna manera sobre la actualidad en aquel momento", dado que "hay uno que se llamaba 'La amenaza nuclear'.

Asimismo, ha destacado la incorporación de un mayor número de árboles pintados a varios conjuntos artísticos como 'Ojos', 'Círculos de colores', 'Ritmos Envolventes' y 'Animales del Bosque' .