Vender ceniza volcánica o piroclastos de La Palma puede conllevar duras multas

La ceniza volcánica y los piroclastos expulsados por el volcán Cumbre Vieja es una pesadilla para la mayoría de habitantes de La Palma. Los bomberos, las fuerzas de seguridad y los propios vecinos no dan a basto para retirarlos de carreteras, plantaciones o patios y terrazas particulares. Pero algunos palmeros han decidido hacer negocio con esta molestia que lo inunda todo. Ya hay muchos anuncios en Internet que venden bolsas de ceniza volcánica e incluso piroclastos expulsados por el volcán.

La mayoría de anuncios que han comenzado a aparecer en algunos portales y aplicaciones de comercio electrónico venden pequeñas porciones de ceniza volcánica, normalmente de 10 gramos, y alcanzan precios de entre 15 o 20 euros por envío. Hay incluso algunos anuncios que venden pequeños piroclastos, las pequeñas rocas de lava expulsadas por el volcán.

El Instituto Geográfico Nacional, el Instituto Geológico y Minero de España y el Instituto Volcanológico de Canarias llevan recogiendo muestras de todo el material expulsado por el volcán para analizar, de manera exhaustiva su composición, y los resultados no se han publicado todavía. Esto hace que sea una irresponsabilidad vender o comprar este tipo de materiales, sin conocer siquiera si su composición puede ser tóxica o perjudicial.

Sacar cualquier tipo de roca, arenas o cenizas volcánicas de La Palma, y de cualquiera de las otras Islas Canarias, es un delito, ya que es patrimonio protegido por las leyes españolas. llevarte en la maleta una roca del Teide o del parque nacional de Timanfaya en Lanzarote puede acarrear multas de miles de euros. Del mismo modo, sacar cualquier material de este tipo de La Palma, y por supuesto venderlo y enviarlo por correo, supone el mismo delito y sus responsables se pueden enfrentar a este tipo de multas millonarias.

La venta de estas cenizas es ilegal, y podría estar sancionada con una multa de hasta 5.000 euros, ya que está completamente prohibido llevarse nada de la isla al tratarse de un paraje protegido; es más, la policía local ya ha tenido que tomar medidas contra los turistas que hacen lo posible por hacerse con un ‘recuerdo’ en forma de roca volcánica, según informan medios locales. Es más, las autoridades advierten de la autenticidad de las cenizas que se encuentran en estos portales de compraventa, que además solo se venden para beneficiarse económicamente y no ayudar a los palmeros.

Todos los días, en el Aeropuerto Internacional de Lanzarote son muchos los turistas que se ven obligados a deshacerse de las rocas que intentan sacar de la isla. Estas rocas volcánicas son detectadas en los controles de seguridad. Según datos del aeropuerto, en temporada alta se han llegado a detectar cerca de medio millar de rocas volcánicas al mes entre el equipaje. delos turistas.