El Tribunal Supremo ha ratificado la condena de 14 años de cárcel, dictada a finales de este año, para D.D., N.M --de 30 años-- y A.I.M --de 31 años--, de nacionalidad rumana, por agredir a una joven de 27 años de nacionalidad paraguaya, el pasado abril de 2017. En un descampado cercano al Estadio de la Cartuja de Sevilla capital.
La sentencia del Alto Tribunal ha confirmado la condena de estos tres hombres por un delito continuado de agresión sexual con la circunstancia de embriaguez, con lo que les ha impuesto, además, la prohibición de aproximarse a menos de 300 metros de la víctima y de comunicarse con ella por cualquier medio o procedimiento durante 20 años. Además, les ha impuesto la medida de libertad vigilada por un tiempo de ocho años y una multa de 540 euros por un delito leve de lesiones con las atenuantes de embriaguez y reparación del daño.
Asimismo, deberán indemnizar con 84.315,55 euros a la víctima por las lesiones y secuelas físicas y los daños morales causados. Dos de los acusados, asimismo, consignaron con anterioridad al juicio la suma de 2.500 euros cada uno de ellos en concepto de reparación del daño.
La Audiencia probó que los hechos se produjeron en la madrugada del 22 de abril de 2017, cuando la víctima fue a una discoteca en compañía de una conocida, quien le presentó a uno de los acusados, que a su vez se encontraba acompañado de los otros dos acusados. Según la sentencia, ambas mujeres "estuvieron hablando, bailando y consumiendo diversas bebidas alcohólicas" con los tres acusados hasta que, sobre las 7,00 horas, la víctima, "que se encontraba bastante afectada por el consumo de alcohol", salió de la discoteca en compañía de los tres procesados y de una cuarta persona.
Además, "en la creencia de que la llevarían a su domicilio", la mujer se subió con ellos en un vehículo, de forma que, en el trayecto, uno de los condenados "comenzó, con ánimo libidinoso, a realizar tocamientos" a la víctima, quien "se opuso y comenzó a gritar", por lo que otro de los investigados "la golpeó en la cabeza, le tapó la boca y la sujetó por los brazos", lo que aprovechó uno de los acusados para penetrarla vaginalmente. En un momento dado, detuvieron el vehículo y otro de los condenados agredió sexualmente a la mujer, tras lo que un tercer acusado la "agarró por el pelo, sacándola por la fuerza del vehículo, arrastrándola unos metros por una zona asfaltada y seguidamente tras darle un golpe en el rostro la penetró vaginalmente".
Después de todo lo ocurrido, los acusados abandonaron a la joven dejándola tirada en una cuneta. La Audiencia subrayó que "cada uno de los tres procesados penetró vaginalmente a la víctima aprovechándose recíprocamente de las facilidades que supone la actuación conjunta y, a su vez, reforzando con su presencia y, en algún caso, con el uso de la violencia, las agresiones sexuales cometidas por sus acompañantes, anulando cualquier posible resistencia de la víctima". "No existe la menor duda de la participación de los tres acusados en los hechos", aseveró la Audiencia