Varias comunidades alivian la movilidad y los cierres perimetrales, pero mantienen buena parte de las medidas contra el coronavirus porque aunque la pandemia se va frenando, no se puede bajar la guardia y las limitaciones han hecho que los parámetros desciendan. En este sentido, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, pedía a las comunidades autónomas de realizar una desescalada "muy prudente".
En Andalucía, Málaga, Granada y Córdoba recuperan su movilidad; mientras que el resto tendrá que esperar hasta marzo. Extremadura permitirá el movimiento total entre sus localidades. Aragón desconfina Zaragoza capital, pero mantiene el resto de restricciones. Castilla y León levanta el cierre entre sus provincias, pero no levanta medidas. Y, la Comunidad de Madrid, la que más incidencia del virus tiene, amplía el toque de queda a las 23 horas.
Como ya anunció la semana pasada la presidenta de la Comunidad de Madrid, la popular Isabel Díaz Ayuso, desde esta noche el toque de queda se retrasa desde las 22 horas hasta las 23h. Además, se permite el cierre de bares y restaurantes a la misma hora.
La relajación de las medidas frente al coronavirus en la Comunidad de Madrid entran en vigor desde las 00.00 del jueves 18 de febrero hasta las 00:00 del lunes 1 de marzo, según consta en un decreto y una orden publicados en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) el pasado sábado.
El viceconsejero de Salud Pública y Plan Covid-19, Antonio Zapatero, avanzó estas medidas de flexibilización el pasado viernes, aunque condicionó la decisión a la evolución de la incidencia acumulada de casos de coronavirus en esta tercera ola. Sin embargo, a la misma vez, vía Twitter la presidenta regional lo dio por hecho, sin condicionamiento alguno.
Fuentes de la Comunidad de Madrid han confirmado a Efe que, tras constatar una bajada de los casos, han decidido aplicar las medidas previstas, entre ellas el toque de queda desde las 23.00 hasta las 6.00 horas.
Este retraso de una hora en el inicio del toque de queda se traslada al cierre de la mayoría de los establecimientos de la región, que debían cerrar como tarde a las nueve de la noche y a partir de hoy jueves pueden hacerlo a las diez.
En el caso de los bares y restaurantes podrán cerrar más tarde, a las once de la noche, aunque no podrán admitir nuevos clientes a partir de las diez y tendrán la posibilidad de hacer servicios de entrega a domicilio hasta las 00.00 horas.
La ocupación máxima por mesa seguirá siendo de cuatro personas en espacios interiores y de seis personas en terrazas al aire libre.
Otra excepción en los horarios son los establecimientos que prestan actividades esenciales, como farmacias, centros sanitarios, clínicas veterinarias o gasolineras, que podrán abrir hasta más tarde.
Por otra parte, los cines, teatros, auditorios, circos de carpa, salas multiusos polivalentes, "espacios similares" y lugares de culto podrán terminar su actividad después de las diez de la noche si los asistentes respetan el toque de queda.
Además, continúan en vigor desde el jueves otras medidas como la prohibición de reuniones de personas no convivientes en domicilios, salvo excepciones, como las parejas y matrimonios que vivan en domicilios distintos o las personas que viven solas, que podrán reunirse con una única unidad de convivencia.
Más allá de estas medidas comunes para toda la Comunidad de Madrid, el Gobierno regional mantiene su estrategia de restricción de movilidad en las áreas con mayor incidencia de coronavirus, que afecta en la actualidad a 55 zonas básicas de salud y catorce núcleos urbanos donde viven casi 1,4 millones de madrileños.
La Junta de Castilla y León ha acordado dejar sin efecto el cierre perimetral provincial que regía desde el pasado 15 de enero, a la vez que mantiene el cierre autonómico, y eliminar el tope máximo de 25 fieles en los espacios religiosos, al permitir de forma genérica un tercio del aforo en las iglesias.
Estas relajaciones en las restricciones aplicadas para contener la pandemia de la covid entrarán en vigor a partir de las 00,00 horas del sábado, tras la publicación mañana en el Boletín Oficial de Castilla y León del Acuerdo firmado por el presidente autonómico y autoridad delegada del Gobierno central, Alfonso Fernández Mañueco, según ha explicado su vicepresidente y portavoz, Francisco Igea, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno.
"No es una respuesta a las críticas ni una rectificación", ha respondido al ser preguntado por las protestas de fieles del pasado fin de semana, entre ellos el arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, y también de hosteleros por su situación de cierre parcial.
Sobre los templos, ha desvelado que en caso de haber podido, la Junta "los hubiera cerrado" como medida preventiva de los contagios en los momentos más delicados de la tercera ola.
Igea ha calificado estos cambios como "mínimos", vinculados al cambio de normativa que ha determinado la suspensión por parte del Tribunal Supremo del adelanto del toque de queda a las 8 y a la mejoría epidemiológica que observan, aunque ha negado que exista contradicción con lo dicho hace sólo dos días, en el sentido de que era pronto para acometer la desescalada por la situación de los hospitales.
El Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón anunció que, debido a la buena evolución de los datos epidemiológicos, se levanta el confinamiento perimetral de Zaragoza ciudad y Calatayud. La medida entrará en vigor el viernes, según indicaba en una rueda de prensa el jueves la consejera de Sanidad, Sira Repollés, acompañada por el director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo.
Asimismo, han informado de que se van a rebajar las restricciones en la localidad turolense de Alcañiz, hasta el nivel de alerta 3 agravado. Sin embargo, en la ciudad de Teruel se mantienen todas las limitaciones.
Extremadura suprime los cierres perimetrales aún vigentes en 22 localidades, pese a que algunas registran una incidencia a los 14 días ligeramente superior a los 500 casos, y aplaza al viernes la decisión sobre ampliación de horarios en comercio y hostelería, en función de si se mantiene la incidencia por debajo de 250 casos, según anunció en rueda de prensa el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, que ha informado de los acuerdos adoptados este miércoles por el Consejo de Gobierno, en la que ha explicado que la supresión de los cierres perimetrales entrará en vigor a las 00:00 horas del viernes.
Según Vergeles, de cumplirse el requisito de incidencia inferior a 250 casos, el horario de estas actividades, así como las culturales y de uso de instalaciones deportivas y gimnasios "deberán acompasarse" al toque de queda fijado a las 22 horas "y que el cliente, por tanto, esté en su casa a esa hora".
Según indicó el consejero de Sanidad, el próximo viernes habrán transcurrido 10 días desde que se adoptaron las últimas restricciones, por lo que si la incidencia ese día está por debajo de 250 casos, el sábado se publicaría una resolución para que las actividades citadas, a las que se sumarían salas de juego y parques infantiles y ludotecas, entre otros, puedan ampliar su horario y adaptarlo al toque de queda.
José María Vergeles ha insistido en que Extremadura se encuentra aún en nivel de alerta 4, en la que están vigentes todavía duras restricciones y obligaciones, como son aforo reducido, utilización de mascarillas o controles policiales y ha apelado a que "ante la duda de si lo puedo o no hacer, mejor no hacerlo".
Por último, cabe señalar que la Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía "no tiene previsto tomar ningún tipo de medidas" encaminadas a la ampliación de los horarios actualmente permitidos de apertura para la hostelería y el comercio para evitar la irrupción de una "cuarta ola" de la pandemia de Covid-19 en la comunidad autónoma, según trasladó el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, en la rueda de prensa posterior a la habitual reunión semanal del Consejo de Gobierno, a preguntas de los periodistas sobre la posibilidad de ampliar los horarios actualmente permitidos --hasta las 18,00 horas en general-- para la actividad de hostelería y comercio. No obstante, sí recuperan la movilidad Málaga, Granada y Córdoba.