A la espera de saber qué ocurre con Navarra, el toque de queda afecta de momento a ocho millones de españoles. Es la restricción más severa e incómoda, en pleno verano, pero no es la única, porque muchas otras comunidades autónomas también están limitando al máximo los horarios y los aforos del ocio nocturno. Al menos de los negocios y locales del sector, porque son muchos los que se resisten a irse a casa en las noches del fin de semana. Y el covid sigue presente.
Queríamos disfrutar del verano, volver a la normalidad y relajarnos pero cierran los locales. El toque de queda ya es una realidad. Segunda noche desde que está vigente en ciudades como Barcelona. Si era necesario o no, solo hay que juzgar con las imágenes de algunos ciudadanos: a más de uno se lo tuvieron que llevar con gran descontento. Bendita la amistad.
"Mientras haya distancia y la gente esté al aire libre, tampoco me parece tan mal", comenta una mujer. Y es que ese ha sido el problema. "Nadie lleva mascarilla, todo el mundo está haciendo botellón. Creo que la medida ya no es efectiva", comenta un hombre sobre la situación en las calles de Barcelona.
En Alicante, el toque de queda está vigente también, ¿pero qué sucede en las horas en las que sí se puede salir? "Ni distancia ni mascarillas, ni nada", comenta una joven. Y cuando es hora de ir a casa, organizan algo "hasta las 06 horas" de la mañana en un domicilio, explica otra joven. La fiesta sigue para muchos, la excusa es el alcohol.
Por ello, en Orense, Galicia, la policía está "controlando los parques y las plazas públicas" para evitar que se celebren botellones. Muchos denuncian que estas medidas llegan tarde, que deberían haberse endurecido las restricciones desde hace semanas por el "descontrol".
Medidas, tardías o no, a las que el próximo jueves se añadirá también Navarra, dejando como plan más lógico la "cena en casa". Todo, en un verano que podría torcerse aún más si seguimos así. De momento, Comunidad Valenciana, Cataluña y Cantabria . Extremadura y Canarias lo han denegado, aunque las islas estudian recurrir.