El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez llevó a cabo el sábado una gran remodelación en su Ejecutivo, que ha afectado a casi todas las carteras políticas del ala socialista, y que supone la salida de su vicepresidenta primera, Carmen Calvo, de su jefe de gabinete, Iván Redondo, y de otros seis ministros. Entre las incorporaciones, destaca la de Félix Bolaños como nuevo ministro de la Presidencia o la de Isabel Rodríguez como nueva portavoz y ministra de Política Territorial.
Los nuevos titulares toman el relevo de los anteriores en carteras destacadas y con importantes asuntos pendientes. El reparto de los fondos europeos, la ley Celaá, los acuerdos para el Consejo General del Poder Judicial, la ley de vivienda... son solo algunas de las cuestiones abiertas en las que los nuevos representantes no siempre están de acuerdo con el trabajo que ya desarrollaron sus antecesores.
La nueva ministra de Política Territorial, que será también la nueva voz del Gobierno, Isabel Rodríguez, se encargará de afianzar la recuparación económica de la mano de los fondos europeos repartiendo los recursos entre las comunidades autónomas.
Pilar Llop, la nueva ministra de Justicia, tiene pendiente la reforma de los delitos de sedición y rebelión, que el anterior ministro empezó solo a hilvanar. Además, Llop tiene que renovar el Consejo General del Poder Judicial, caducado desde 2018 y bloqueado por el PP, y parte del Tribunal Constitucional; así como rematar la Ley para que los fiscales sean instructores.
Pilar Alegría, la nueva ministra de Educación, deberá llevar a la práctica la Ley Celaá con todas sus polémicas, como el posible MIR para profesores. Y está pendiente la Ley de Formación Profesional.
Por otro lado, es posible que el cambio de Ábalos por Raquel Sánchez lleve a un acuerdo para sacar adelante la Ley de Vivienda, uno de los conflictos con Unidas Podemos.
Por su parte, Félix Bolaños, el nuevo ministro de Presidencia, será quien coordine el gobierno de coalición. Tendrá que retomar la mesa de diálogo con Cataluña y sacar adelante el Proyecto de Ley de Memoria Democrática.
La política Exterior tiene como reto las relaciones con Marruecos, así como lograr mayor cercanía con Estados Unidos. De eso, precisamente, se encargará José Manuel Albares.
En Ciencia, Duque empezó a trabajar ya en una Ley de Ciencia, una tarea pendiente para Diana Morant.
Por último, Miquel Iceta, ahora ministro de Cultura, tendrá que sacar adelante una nueva Ley del Deporte, así como el estatuto del artista, además de relanzar el sector cultural que ha sufrido mucho durante toda la pandemia.