Es la pregunta que se hacen todos aquellos menores de 60 años que ya han recibido la primera dosis de AstraZeneca: ¿Qué pasa con la segunda dosis, ahora que Sanidad ha cambiado de nuevo el criterio para anunciar que solo se suministrará esta vacuna para mayores de 60, hasta 69)? Y la respuesta está todavía en el aire y es objeto de un amplio debate entre los expertos.
En su momento, Carolina Darias se limitó a contestar que están “esperando” a los estudios que se están llevando a cabo y “la decisión que se va a adoptar en el ámbito europeo”, dejando ver que las opciones podrían pasar por mezclar las vacunas, usando la segunda dosis de otra compañía, o dejar solo una única dosis, teniendo en cuenta que su eficacia es de un 70% de protección frente al covid, según los ensayos clínicos de la compañía anglosueca.
"En relación a la segunda dosis es una cuestión que está por determinar. Estamos pendientes de ver algunos estudios que pudieran, desde la evidencia científica, avalar la administración, bien de una segunda dosis con otra vacuna, como está sucediendo en algunos estudios en Reino Unido, y también la posibilidad, que hay que valorarla, de que, conforme a la ficha técnica de la propia vacuna de AstraZeneca, se establece un porcentaje del 70 solo con la primera dosis", manifestó la ministra de Sanidad.
Abierto el debate, ya son varios los expertos que apuntan a una tercera opción, que pasa básicamente por terminar de administrar la pauta completa: es decir, a todos aquellos que se les suministró la primera dosis de AstraZeneca, darles también la segunda dosis de la misma compañía. Es el consejo de la Sociedad Española de Inmunología, así como de Margarita del Val, quien no aboga por combinar vacunas: “No hay razón para alarmarse. El riesgo es mínimo para todos”, ha dicho, en referencia a AstraZeneca.
En esta línea, también Federico Martinón, uno de los mayores expertos en vacunación de España y miembro del comité asesor de vacunas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), defiende como opción "más razonable" poner la segunda dosis de AstraZeneca a los que hayan recibido la primera.
"No nos podemos permitir perder la perspectiva", ha dicho en declaraciones a la prensa ante el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS), recogidas por EFE.
Señalando que si bien la Agencia Europea del Medicamento señaló que los trombos atípicos que se han detectados son un posible efecto secundario de la vacuna de AstraZeneca, Martinón recuerda que no por ello han dejado de respaldar su utilización.
De hecho, al inicio de la comparecencia, la EMA subrayó: "Nuestro Comité de Seguridad de Farmacovigilancia ha confirmado que las ventajas de la vacuna de Astrazeneca para evitar la covid-19 son mucho mayores que los efectos secundarios. La covid cada día sigue causando cientos de fallecimientos en toda la UE. Esta vacuna ha demostrado ser muy efectiva y está salvando vidas. La vacunación es extremadamente importante y necesitamos usar las vacunas que tenemos para protegernos de los efectos devastadores".
En este sentido, Martinón sostiene que lo ocurrido, tanto en España como otros países, es que se ha reaccionado dando un paso más allá, con una manera de proceder a todas luces "más restrictiva".
Sin querer en absoluto “quitar importancia” al efecto adverso muy “poco frecuente” incluido ya en la ficha técnica, sí hace hincapié en que que una de cada cinco personas que contraen el virus y son hospitalizadas desarrollan algún fenómeno tromboembólico, mientras que a una de cada millón de personas vacunadas con AstraZeneca podría ocurrirle seguramente por una "susceptibilidad específica no identificada".
Así, el especialista, jefe de Pediatría, considera que si la primera dosis no ha causado problema alguno, sería "muy remoto" pensar en un problema por razón "acumulativa" con la segunda, que es la que cierra la pauta.
El intervalo entre una dosis y otra puede ser de hasta doce semanas y a mayor tiempo de espera, "mejor funciona", por lo que Martinón, como opinión personal, ve, en la encrucijada actual, hasta cuatro salidas posibles:
El "riesgo potencial versus beneficio" de AstraZeneca se ha demostrado en "el mundo real", ha insistido, subrayando: "Funciona y funciona muy bien".