El preocupante aumento de contagios entre los jóvenes, cuya incidencia triplica a la media nacional, ha llevado a muchas comunidades autónomas a pedir un endurecimiento de las restricciones por coronavirus. Algunas, como Castilla y León, ya han pedido que se imponga un nuevo toque de queda en toda España, algo que ya ha descartado el Gobierno. Canarias por ejemplo ha acudido a los tribunales. Otras, como Cataluña, apuestan por cerrar el ocio nocturno.
El Gobierno canario ha decidido solicitar al Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) un 'toque de queda' para islas que se encuentran en nivel 3, como Tenerife, y en 4 --actualmente no hay ninguna-- que comprendería entre las 00.30 horas y las 06.00 horas con el fin de restringir la movilidad.
Así lo ha manifestado Blas Trujillo, consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias, en la rueda de prensa posterior del Consejo de Gobierno tras los datos publicado este jueves que recogían 513 nuevos casos de covid en las últimas 24 horas, de tal forma que los casos acumulados en las islas se elevan a 63.812, si bien no ha habido que lamentar fallecidos por tercera jornada consecutiva, quedándose el total de óbitos en 791.
La Comunidad Valenciana ha hecho lo propio con el Tribunal Superior de Justicia de Valencia. El Gobierno de Ximo Puig quiere un toque de queda selectivo por municipios con alta incidencia --de 1.00 a 6.00 horas-- además de la limitación de las reuniones a diez personas en todos los espacios.
De este modo, Valencia se suma a Cataluña, que también cerrará el interior del ocio nocturno, y a Cantabria, que ha decretado el cierre del ocio nocturno en varios municipios, entre ellos Santander.
Castilla y León fue la primera en mostrarse a favor de la imposición de un nuevo toque de queda. La consejera autonómica de Sanidad, Verónica Casado, ha planteado esta medida de la misma manera que se ha implantado en Portugal.
La Junta de Castilla y León propuso establecer un nuevo toque de queda entre las 01.00h y las 06.00h en toda España. Sin embargo, esta idea ya fue descartada por el Gobierno porque, tal y como ha asegurado el presidente Pedro Sánchez, las comunidades tienen herramientas suficientes para controlar la pandemia.
De momento, Castilla y León lo que ha hecho ha sido decretar el cierre del ocio nocturno desde las 2h, prohibir el consumo en barra y que haya pista de baile. Otras regiones han apostado también por limitar o cerrar el ocio nocturno para frenar el aumento de contagios entre los jóvenes.
Cataluña ha dado marcha atrás en su desescalada y ha anunciado el cierre del ocio nocturno a partir de este fin de semana en espacios cerrados. Además, impone restricciones en acontecimientos que se celebren al aire libre.
Navarra, por su parte, ha adelantado el cierre de discotecas, salas de fiesta, establecimientos con licencia de bar especial y café espectáculo y bingos y salones de juego a la 01:00 h.
Aragón ha anunciado que vuelve al nivel 2 de alerta modulado. Esto supone aforos limitados, reuniones grupales de diez personas como máximo y el cierre del ocio nocturno a las 00.30h.
Cantabria tiene cerrados desde el viernes 2 de julio los locales de ocio nocturno en los 16 municipios con nivel de riesgo medio por covid, entre ellos Santander, por la cantidad de brotes activos vinculados a estos establecimientos.
Baleares ha extendido las limitaciones de aforos de bares y restaurantes de Magaluf, en Mallorca, y Sant Antony de Portmany, en Ibiza.
En la Comunidad de Madrid el ocio nocturno, abierto desde el pasado 21 de junio, dependerá de la evolución sanitaria en la región, que goza de una menor tensión que en otras comunidades autónoma.