El rey Felipe VI ha llegado este domingo al Museo Nacional de Arte de Cataluña, en Barcelona, para presidir la cena inaugural del Mobile World Congress (MWC), donde a las puertas no le han recibido ni el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ni la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
Han recibido al monarca el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; la vicepresidenta primera del Ejecutivo y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño; la delegada del Gobierno en Cataluña, Maria Eugènia Gay; el presidente de Fira de Barcelona, Pau Relat, y el presidente del consejo de la GSMA, empresa organizadora, y mandatario de Telefónica, José María Álvarez-Pallete.
Una vez ha entrado, Don Felipe ha saludado a algunos de los asistentes a la cena, como la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto; la alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), Núria Marín, y algunos CEO y empresarios de compañías de telefonía, entre otros.
Sin embargo, ni Aragonès ni Colau ni el vicepresidente de la Generalitat y consejero de Políticas Digitales y Territorio, Jordi Puigneró, han participado en el besamanos. Instantes antes de la celebración, sí que han coincidido en una sala y han hablado durante un minuto sobre la guerra en Ucrania.
Durante la cena, Felipe VI ha presidido la mesa principal, formada por 19 personas: a su derecha ha tenido a Pedro Sánchez, a su izquierda se ha sentado el director general de la GSMA, Mats Granryd, y enfrente han estado situados Pere Aragonès y Nadia Calviño. Ada Colau, Pau Relat y varios CEO de compañías telefónicas también han compartido esa mesa.