Desde su intrusión en la política, Pablo Iglesias cultivó un aspecto insurgente y distendido. La imagen también era política. Como la pana en su día de Felipe González. El lenguaje no verbal de la política sugiere que se debería vestir al menos con zapatos y americana., pero él siempre ha presumido de desaliño.
El look de Iglesias encarnaba el espíritu callejero y de rebeldía asamblearia. Primero fueron camisas a cuadros, luego camisas blanca y una corbata con el nudo visiblemente aflojado, se pasó de la coleta al moño y ahora, se ha pasado a un look mucho menos asamblearias y más burgués. Acorde con su nueva posición. Pablo Iglesias, de 42 años, ha decidido cambiar de imagen tras dejar la política y se ha cortado el pelo. Sí, al final se quitó la coleta, y sí, el hecho se convirtió en noticia, cosas de la sociedad líquida en la que los detalles se elevan a categoría. En el caso de Iglesias dejar la coleta significa muchas cosas, como dejar Vallecas. El 4M fue un punto y final para él, que ahora descansa leyendo.
En una foto difundida en redes sociales y realizada por el fotógrafo oficial de Podemos, se ve a Iglesias con el pelo corto y sin la coleta o el moño que acostumbraba a lucir en los últimos tiempos. Sentado en una mesa al aire libre, con un libro en la mano y con nueva imagen, Iglesias reaparece tras su dimisión el pasado 4 de mayo por los malos resultados de la izquierda en las elecciones a la Asamblea de Madrid, en las concurría como cabeza de cartel de Unidas Podemos. Su coleta, que le había llevado a ser conocido como 'El coletas', siempre fue un asunto polémico ya que muchos consideraban que un político no podía tener esa imagen. Nunca se la quitó hasta ahora.