Máxima expectación en el Congreso de los Diputados, donde se celebra la sesión de control al Gobierno. La estrella será Pablo Casado. El aún líder del PP va a ser el que haga la pregunta al presidente Pedro Sánchez. A la entrada del Congreso se ha limitado a decir buenos días, y no ha contestado a la pregunta de si se presentará como candidato al Congreso extraordinario.
Con la crisis interna del PP trasladada al Congreso, Pablo Casado no irá a la sesión de control acompañado de Teodoro García Egea, que dimitió ayer, acorralado por el presunto espionaje a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Pablo Casado preguntaría al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez: "¿Cuánto más está dispuesto a ceder a sus socios independentistas para seguir en La Moncloa?".
Los diputados del PP temen que el presidente del Gobierno pueda darle la vuelta, que sea el líder popular el que acabe teniendo que responder sobre su futuro al frente de la oposición.
Si ayer dimitió el secretario general del PP, Teodoro García Egea, mano derecha de Pablo Casado, hoy se cuestiona si la marcha del presidente del PP será cuestión de horas o aguantará hasta la convocatoria de al menos, la Junta Directiva de la próxima semana.
Algunas fuentes hablan de que Pablo Casado se plantea dimitir tras la marcha de Egea. Sin embargo, otras aseguran que su intención es que en la Junta Directiva se convoque un Congreso del PP para elegir su sucesor a principios de abril y mantenerse en el cargo hasta entonces.
De momento, tras la sesión de control al Gobierno, a la tarde, Pablo Casado tiene una reunión del Comité Autonómico, con los barones del PP, y en el que no estará la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que no ha sido invitada.
La inmensa mayoría de los barones regionales del PP, 15 de 17 ya no apoyan a Pablo Casado. Incluso, el presidente de Murcia, Fernando López Miras, eterno apoyo del tándem Casado-Egea se ha desmarcado pidiendo un Congreso ya.