Los nuevos ríos de lava en la isla de La Palma amenazan con nuevos desalojos. Es un suma y sigue de tragedias que asolan a muchas familias, que pueden perderlo todo, pero también a propietarios de negocios y de cultivos.
Esta jornada se ha podido ver cómo muchos de los vecinos sacaban todo lo que podían de sus casas, al igual que lo hicieron otros este sábado. La recomendación se ha hecho para los municipios de El Paso, Los Llanos y Tazacorte y para los barrios de Tajuya, El Pedregal y La Laguna.
Las nuevas coladas de lava, que surgieron tras el derrumbe del flanco norte del volcán en la tarde del sábado, arrasan con todo a su paso. La localidad de Todoque ha quedado sepultada. "No queda nada", comenta una vecina. Ahora lo que preocupa especialmente es el desplazamiento de la lava que pone en alerta a nuevas zonas, como La Laguna, cerca de la nueva lengua de magma.
Los vecinos evacuados con residencia en el perímetro de seguridad regresan para recoger enseres ante el peligro de la nueva colada. "A lo largo de la mañana hemos intentado que los vecinos sacaran los mayores enseres posibles", ha explicado Noelia García, alcaldesa de Los Llanos de Aridane.
Otros vecinos están expectantes ante el miedo de ser desalojados. Algunos han decdido recoger e irse directamente, como Teresa. "Por prevenir ayer sacamos todo lo que se pudo. Dije que esperaba hasta el final, pero este es el final", comenta. No sabe cuál es el futuro, la incertidumbre sigue haciendo mella en estos vecinos.