Llega tanta lava del volcán de La Palma al mar que ha provocado el colapso del acantilado de Tazacorte, donde desde ayer se forma una nueva fajana.
El desprendimiento de parte del acantilado de la costa de Tazacorte ha provocado una intensa nube de polvo que se suma a la de gases tóxicos que se genera cuando el magma entra en contacto con el mar.
La colada de lava del volcán de Cumbre Vieja número siete está siendo vigilada por los técnicos muy de cerca porque lleva un gran aporte de lava y esta discurre con mucha velocidad hacia el mar. Es una prueba más de que el "sistema sigue muy vivo", ha señalado el geólogo Vicente Soler.
Afortunadamente, la colada no supone un riesgo para la población y por eso el Pelvolca ha levantado esta mañana el confinamiento de 3.000 vecinos, encerrados en sus casas desde ayer por seguridad.
No obstante, la actividad aérea sigue paralizada todo el dia de hoy en La Palma.