'Potxolo', el etarra que pidió perdón a la viuda de Jáuregui, embargado para pagar a sus víctimas
Sus bienes se han embargado para pagar la responsabilidad civil por sus atentados
Tiene al menos cinco muertes a sus espaldas y es consciente de que lo que hizo es "imperdonable"
Ahora está en tercer grado y trabaja como panadero
Se llama Ibon Etxezarreta y su alias es "Potxolo", palabra cariñosa en euskera, que viene a significar, bonito o regordete. Pero la vida de este Potxolo tiene poco de 'bonita'. Durante años, participó en casi una veintena de atentados, por ejemplo el que acabó con la vida del jefe de la patronal guipuzcoana José María Korta, o la del político socialista Juan María Jáuregui en el año 2000.
14 años después se reunió con su viuda, Maixabel Lasa. Le dijo que lo sentía mucho y que era consciente de que lo que hizo "es imperdonable", por lo que no esperaba su perdón. Entre ellos se creó un vínculo, y Etxezarreta llegó a estar en en el homenaje que ese año se hizo a Jáuregui junto a la viuda y al hermano de su víctima. Horas antes de ese encuentro, Maixabel Lasa concedía una entrevista a Mercedes Milá para el programa de Telecinco "Diario de". Ya había recibido una carta de este etarra en la que le mostraba su arrepentimiento.
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"Potxolo" fue detenido en 2001 y juzgado por sus atentados, que le supusieron una condena de más de 390 años de cárcel. 20 años después todavía cumple su pena, pero desde noviembre lo hace en tercer grado, saliendo de la prisión de Zaballa de lunes a viernes para trabajar de panadero.
No fue de los primeros en desmarcarse de la banda ni en acogerse a la "Vía Nanclares", pero lo hizo. Y en 2014 pidió ver a Maixabel Lasa, de cuyos labios escuchó: "Prefiero ser la viuda de Juan Mari que tu madre".
Hace unos días la Audiencia Nacional le comunicó que además de la pena de prisión, tiene pendiente la deuda económica por sus atentados y ha embargado sus bienes y salarios para que devuelva al Estado las indemnizaciones que ya fueron adelantadas a las víctimas. Así que el sueldo de panadero, irá en parte a ese fin, igual que el resto de propiedades del etarra arrepentido.
Entre él y Aitor Bores, otro etarra de la Vía Nanclares que acaba de recibir la misma comunicación, tienen que pagar medio millón de euros.
Captado durante sus viajes a Francia con un equipo de fútbol
Ibon Etxezarreta tiene 50 años, es donostiarra y entró en ETA en 1994, a los 23. Fue captado por sus numerosos viajes a Bayona, Francia, a donde viajaba con un equipo de fútbol. a mediados de ese año, hizo un cursillo de armas y pasó a formar un comando legal con su compañero Luis Carrasco Aseguinolaza, alias Luze.
El comando se llamó Eremuza (campo) y sus miembros ejecutaron al menos seis atentados entre 1997 y 1998:
- Ametrallamiento del edificio de la Subdelegación del Gobierno en Guipúzcoa.
- Ametrallamiento del cuartel de la Guardia Civil de la avenida Zumalacárregui en San Sebastián.
- Bomba en en una sucursal del Banco Santander en Pasajes (Guipúzcoa). Dos agentes de la Ertzaintza resultaron heridos.
- Lanzamiento de granadas contra el cuartel de la Guardia Civil de Intxaurrondo, en San Sebastián.
- Lanzamiento de granadas contra el cuartel del Ejército de Loyola, también en San Sebastián.
- Explosión de un artefacto en la subdelegación del Gobierno de San Sebastián.
Cambio de comando, el comienzo de una carrera más sangrienta
Los primeros atentados de Etxezarreta se saldaron con daños materiales y dos agentes heridos. Pero en 2000 dio un salto, tras ser llamado por Txeroki, que le comunicó que estaría en un nuevo comando, "Buruntza", junto a su compañero "Luze" y los también etarras "Txema" y "Susper".
Poco más de un año, estuvo "Potxolo en el comando "Buruntza" que sí provocó varias muertes:
- Julio de 2000: Asesinato a tiros de Juan María Jaúregui. Etxezarreta era el conductor del vehículo que usaron los terroristas pero asegura sentirse tan autor material como el que disparó el arma.
- Agosto de 2000: Asesinato con coche bomba del presidente de la Patronal de Guipúzcoa, José María Korta.
- Agosto de 2000: Explosión de cuatro artefactos, en camiones de dos empresas estacionados en Irún.
- Septiembre de 2000: Atentado frustrado cerca del museo Chillida Leku, con la colocación de ocho granadas.
- Noviembre de 2000 Dos granadas en el cuartel de la Guardia Civil de Intxaurrondo.
- Noviembre de 2000: Lanzamiento de granadas y coche bomba "trampa" en el cuartel de la Guardia Civil de Irún, en el que resultaron heridos un agente y dos civiles.
- Explosión de un artefacto en una garita de la Guardia Civil del Puerto de Pasajes, en Guipúzcoa.
- Explosión de un artefacto en casa de la concejala del PP María Rosario Dorda, en Fuenterrabía.
- Mayo de 2001: Asesinato a tiros del director financiero de El Diario Vasco, Santiago Oleaga.
- Vehículo bomba junto a la sede del Banco Guipuzcoano y de El Diario Vasco en San Sebastián.
- 14 de julio de 2001: Asesinato a tiros del Jefe del Centro de Inspección General de Ertzaintza Mikel Uribe.
Cinco semanas después de ese último atentado, "Potxolo" y sus compañeros de comando fueron detenidos y unos meses después empezaba el rosario de juicios contra él por asesinatos, robos, atentados, estragos... que acabaron sumando esos casi 400 años de cárcel.
Arrepentimiento
Fue después de unos años en prisión, cuando Ibon Etxezarreta empezó a dar pasos hacia el arrepentimiento y pasó al lado de los "disidentes" de la banda, de los que se desmarcaban de seguir las instrucciones de huelgas, etc. de ETA. En el año 2010 firmó un comunicado junto a otros etarras arrepentidos en la que pedían a la banda "cerrar de modo oficial la etapa de la lucha armada" y escenificarlo.
En 2014, pidió reunirse con Maixabel Lasa, que ya se ha visto con otro de los compañeros de "Potxolo" en el asesinato de su marido y que siempre ha defendido este tipo de encuentros. A ella le reconforta saber que dos de los tres asesinos de su marido se han arrepentido.
Maixabel e Ibon se han visto en la cárcel y fuera de ella. Llegaron a hacerlo incluso delante de las cámaras para el documental Zubiak. Decían sus responsables que ahora Ibon tiene ética y siente que no tiene su futuro.
El exetarra panadero tiene que pagar ahora sus deudas económicas porque no, no han prescrito, igual que no prescribieron sus asesinatos.