Después de 38 días de erupción, el volcán de La Palma está expulsando tanto azufre como el primer día. Lo peor de todo, según explican los científicos, es que el volcán de La Palma acumula en su interior tanta energía térmica que equivale a 4.000 bombas atómicas.
El volcán de La Palma continúa rugiendo sin cesar, por lo que confirma las predicciones de los científicos. Algunos de ellos ya alertan de la posibilidad de terremotos como el gran riesgo, porque no avisan. De hecho, los científicos que monitorizan 'in situ' la emergencia del volcán de La Palma han alertado ya de que los terremotos en la zona pueden alcanzar la categoría de magnitud 6 y han pedido a los vecinos del suroeste de la isla que se informen sobre cómo proceder llegado el caso.
Las cámaras del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcán) han tratado de captar con detalle esa actividad, mostrando en un vídeo un abundante fluido de lava que transporta rocas de grandes dimensiones, una tónica que se ha repetido en los últimos días. De hecho, ayer mismo vimos una lluvia de trozos de roca cayendo como si fuera lluvia y provocando el uso de paraguas y gafas de protección.
La erupción del volcán de La Palma comenzó hace más de un mes y desde entonces la actividad volcánica no ha parado. Se calcula que las coladas de lava procedentes del volcán ya han afectado a 900 hectáreas y han destruido más de 2.000 edificaciones, aparte de otras 124 posiblemente afectadas.
También ha afectado a más de 66 kilómetros de carretera y otros otros 3,4 se han visto parcialmente dañados.