Es la imagen de la jornada. Vox festejó su gran resultado como tercera fuerza recordando, no se sabe si con sarcasmo o sin intención a la del PSOE del 82. El resultado que arrojan las elecciones generales de este domingo para el PSOE es decepcionante para el partido al empeorar los resultados logrados el 28 de abril --pierde tres escaños, con más del 96 por ciento del voto escrutado-- y no tener a priori mejores opciones para gobernar que las que tuvo entonces. Vox ha logrado subir 28 escaños al grito de Viva España. Los moderados se han quedado en casa, mientras que el PP ha subido 21 escaños llegando a los 87 escaños.
Abascal fue el primero en hablar, casi el único que tenía ganas de hacerlo junto con ERC. “No nos regodeemos en la euforia. Hacedlo solo esta noche. A partir de mañana tenemos la responsabilidad histórica de construir un futuro mejor para generaciones de españoles. Tenemos la posibilidad de construir una alternativa patriótica y social”.
“Tenemos, por supuesto, la responsabilidad histórica de construir una verdadera oposición al consenso progre; una oposición que gracias a vosotros cada vez es más fuerte. Hemos llegado hasta aquí a pesar de las zancadillas. Hemos llegado hasta aquí sin un solo euro de dinero público que los demás partidos malgastaban. Hemos llegado hasta aquí pese a los insultos sistemáticos que nos han lanzado desde las tertulias. Nos insultaron antes de tener 24 diputados,. Insultaron a esos 24 diputados y a dos millones seiscientos mil. Ahora tienen que insultar a más de tres millones de españoles. Pero a nosotros ni los insultos ni los estigmas nos van a detener en la responsabilidad de conseguir una patria más unida, y de españoles libres en todo el territorio nacional. Podemos mirar al futuro con más optimismo, pero debemos hacerlo sin la euforia.
"Más allá, debemos estar preocupados por la gobernabilidad de España. Aún hay incertidumbre sobre la respuesta del Estado a los golpistas de Cataluña. De cómo se va a devolver la libertad a unos catalanes secuestrados por la rebeldía. Más allá de la celebración que nos merecemos no os vamos a ocultar que nosotros estamos preocupados por trabajar a partir de mañana con toda la honradez y dignidad que merecéis".
El PSOE fue moderando paulatinamente en los últimos días de la campaña sus expectativas para este domingo y ya no descartaba perder incluso algún diputado, como finalmente ha ocurrido. No obstante, sus perspectivas cuando se produjo la repetición electoral eran claramente la de mejorar su representación y aumentar así la presión sobre el resto de fuerzas políticas para que, al menos, le dejasen gobernar en minoría, si volviese a ser imposible un acuerdo de gobierno.
En el cierre de la campaña, en el partido ya señalaban que el objetivo era al menos mantenerse con una representación similar a la lograda el 28 de abril, un objetivo que no se ha logrado en Madrid, Navarra, Baleares, Cantabria y Ceuta, donde han perdido un diputado en cada una de estas circunscripciones. En cambio, el PSOE gana un escaño por Huelva y otro por Huesca.
Aunque no pierde escaños, el PSOE pierde su posición de primera fuerza en Galicia, donde el 28 de abril obtuvo un resultado histórico ganando por primera vez unas generales en esta comunidad.
El PSOE ha ganado las elecciones generales de hoy con 120 escaños, pero ha fracasado con la repetición electoral ya que se ha estancado en porcentaje de votos y ha retrocedido tres escaños con casi el 95 por ciento escrutado. El resultado del resto de las fuerzas políticas no ayuda a que sume ni el bloque de la izquierda y ni el de la derecha para gobernar y además, ha propiciado que se acentúe el bloqueo. Así las cosas, las únicas salidas para formar gobierno son dos: o que Pedro Sánchez alcance un acuerdo con el PP o que pacte con Podemos y los independentistas.
El claro triunfador de la jornada ha sido el partido de Santiago Abascal, que ha pasado de 24 a 52 escaños, cumpliendo con el pronóstico que le daban muchas encuestas, aunque alguna llegó a vaticinar hasta 60 escaños para este partido. Vox ha logrado situarse como primera fuerza política en la Región de Murcia y como segunda en Andalucía.
Parte de esta victoria ha sido a costa de Ciudadanos, que se ha desplomado al perder 47 diputados y quedarse tan solo con 10. El partido de Albert Rivera se ha quedado con representación en tan solo cuatro comunidades autónomas: Andalucía, Cataluña, Madrid y Valencia.
El partido naranja queda así en una posición complicada por que ahora ya no sumaría con el PSOE para poder desbloquear la situación, como sí habría ocurrido tras el 28 de abril, ni tampoco con los partidos de la derecha, PP y Vox. Ello, a pesar de que el líder naranja ha anunciado durante la campaña su disposición a pactar con quien obtuviera más escaños para facilitar la formación de gobierno.
El Partido Popular, por su parte, ha logrado subir 22 escaños, al pasar de los 66 diputados que obtuvo el pasado 28 de abril a 88 parlamentarios. No obstante, este crecimiento es mucho menor del que auguraban sus dirigentes y más discreto que el que habían pronosticado los sondeos, que llegaron a vaticinar más de 100 escaños.
Unidas Podemos es otro de los partidos que ha sufrido un retroceso en el día de hoy, aunque ha aguantado a pesar de tener como competidor a Mas País, nacido de la costilla del partido morado y liderado por Íñigo Errejón. Pablo Iglesias ha logrado aunar un total de 35 escaños, de los que 26 son de Unidas Podemos; 7 los aporta EnComunPodem y 2 proceden de Podemos-EU en Galicia.
Sin embargo, Errejón no ha logrado capitalizar la pérdida que ha tenido el partido 'morado' y la división ha perjudicado a ambos partidos. Así, Más País solo ha conseguido entrar en el Congreso con dos diputados. Por el contrario, los partidos independentistas han ganado terreno en el nuevo Congreso y contribuyen así a que se acentúe el bloqueo, salvo que Pedro Sánchez opte por contar con ellos para formar un gobierno.
De hecho, el partido independentista catalán más radical, la CUP, entra en el Parlamento con 2 escaños. El PNV gana uno y pasa a tener 7; Bildu gana otro y pasa a contar con 5 diputados; JxCat suma uno más y tendrá 8; vuelve el BNG con un representante y solo ERC pierde 2 y pasa de 15 a 13.