El uso de las mascarillas queda suspendido en los exteriores también en la playa, donde ir con la cara tapada es especialmente molesto. La norma, que ha entrado en vigor este sábado, también apunta a que su uso deberá ser obligatorio en el caso de que no se pueda guardar la distancia de seguridad. Y parece que esta parte no se ha entendido muy bien, según denuncian algunos bañistas. "Parece que no hay pandemia", denuncia una mujer.
La ministra de sanidad, Carolina Darias, recordaba que hay que llevar siempre una mascarilla "con nosotros aunque no esté puesta" para cuando no se pueda mantener la distancia de seguridad, y que incumplir su uso en los espacios que recoge el RD sigue sujeto a sanción según recoge el artículo 31 de la Ley.
"Estamos ante una medida prudente, que se va a producir de manera progresiva y gradual, liberándonos de llevarla en aquellos espacios al aire libre que la trasmisión es casi inexistente. Es un medida que nos pone en las mismas condiciones de los países de nuestro entorno que están llevando a cabo la medida de flexibilización de su uso obligatorio; y es una medida que nos acerca a la normalidad, con prudencia y que además nos da alergia colectiva", añadía.
De este modo, explicaba que las mascarillas dejan de ser obligatorias en el exterior si se mantiene 1,5 metros de distancia o cuando se vaya con personas convivientes.
No obstante, la mascarilla va a seguir siendo obligatoria en eventos multitudinarios que se celebren de pie al aire libre, pero no si se celebran sentados y se garantiza la distancia de 1,5 metros. También serán obligatorias en espacios cerrados de uso público, así como en los medios de transporte público, sitios públicos, etc.
La Conselleria de Justicia, Interior y Administración Pública, a través de la Secretaría Autonómica de Seguridad y Emergencias, ha emitido una circular dirigida a los ayuntamientos de la Comunitat Valenciana en la que se les informa de la normativa a aplicar tanto en las piscinas de titularidad pública de uso colectivo como en los parques acuáticos, donde este verano no será obligatorio el uso de la mascarilla salvo en los accesos y vestuarios.
Este tipo de instalaciones están sujetas a las restricciones que la Conselleria de Sanidad Universal y Salud Pública establece para todo el sector de los establecimientos abiertos a la pública concurrencia, debido a la pandemia por Covid.
No obstante, las restricciones pueden variar a lo largo del verano en función de la sucesiva publicación de las resoluciones sanitarias que se deriven de la evolución de la emergencia sanitaria, ha incidido la Generalitat en un comunicado.
La circular especifica que los usuarios y usuarias de estos recintos podrán evitar el uso de la mascarilla durante el baño en piscinas de uso colectivo, exteriores o cubierta y en los periodos de descanso después del baño o en la práctica de deporte.