Las condiciones meteorológicas influyen en la seguridad en las carreteras. La nieve o el hielo pueden conllevar serios riesgos, por lo que se sugiere atender a las recomendaciones de la Dirección General de Tráfico (DGT) para conducir de manera segura.
Los conductores deben prestar atención a las señales de tráfico y a las alertas por la peligrosidad en las vías. Y es que existen cuatro colores para informar de cómo están de transitables o no las carreteras españolas, según se recoge en la revista de Tráfico y Seguridad Vial de la DGT.
La velocidad máxima en el nivel verde es de 100 km/h en autopistas y autovías. En el resto de carreteras se debe circular a 80 km/h como máximo. En cuanto a los camiones, habrá limitaciones especiales, como tener que circular siempre por la derecha y no adelantar. La DGT recomienda no circular por puertos de montaña con este nivel.
El nivel amarillo contempla las vías con una mayor tasa de nieve. En este escenario, los camiones tienen prohibido circular. El resto de vehículos, como los autobuses, sí que pueden circular, pero no pueden superar los 60 km/h. Las autoridades recomiendan en este caso extremar precauciones.
El siguiente nivel, es decir, conlleva mayores riesgos, es el rojo. En este escenario, tanto camiones como vehículos articulados o autobuses tendrán prohibido circular. El resto, como los turismos, si podrán hacerlo, pero con un límite máximo de velocidad de 30 km/h. Además, se deberán utilizar cadenas o neumáticos especiales de nieve.
La máxima alerta es el nivel negro. En este caso queda totalmente prohibido conducir, ya que la cota de nieve es muy elevada, lo que conlleva muchos riesgos de accidente. Las autoridades, en este nivel, recomiendan -en caso de que te pille fuera- encender la calefacción y quedarse dentro del vehículo, o acudir a un refugio cercano. DGT destaca la importancia de mirar el tráfico y los niveles antes de emprender el viaje. Las precauciones garantizan una conducción más segura.