El rey Juan Carlos cumple este martes 83 años, y lo hace en Emiratos Árabes Unidos, donde permanece alojado desde hace cinco meses tras su marcha provocada por sus presuntos negocios ocultos en el extranjero y sin pistas sobre cuándo podría regresar a España. Las últimas imágenes del rey mérito publicadas por el programa de Telecinco, 'Viva la Vida' muestran en grave deterioro de su estado de salud en un momento en el que un nuevo escándalo financiero, en este caso relacionado con un sobrino, salta a las portadas de la prensa nacional.
Este va a ser, sin duda, uno de las celebraciones más tristes del monarca. A casi 6000 kilómetros del Palacio de la Zarzuela, y sin la compañía de su familia. Su setenta cumpleaños fue el más celebrado. Era 2008 y el entonces príncipe Felipe le sorprendió con un discurso de agradecimiento en una fiesta con 400 invitados. Asistieron el Gobierno, presidentes autonómicos e históricos líderes políticos de su reinado. Diez años después, ya como rey emérito, la fotografía de su fiesta de cumpleaños revela sus primeros problemas, con la ausencia de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, aunque ese mismo año, el Congreso en pleno aún le honró con motivo del 40 aniversario de la Constitución.
Desde entonces, caída libre del monarca, investigado en tres causas judiciales, hasta llegar a la reciente imagen desvelada por Telecinco en Abu Dabi. Celebrará su cumpleaños lejos de España, con dudas sobre su estado de salud y acompañado, según El Confidencial, de su hija Elena. Don Juan Carlos ha hecho llegar su deseo de regresar a España en un momento en que el Rey ofrece sus discursos más importantes. El de Navidad y la Pascua Militar de mañana. Tras ellos se abrirá de nuevo el debate sobre su regreso.
Desde que abandonó España el pasado 3 de agosto, Don Juan Carlos nunca ha ocultado sus deseos de volver y, según aseguran sus amigos más cercanos, en cuanto pueda - o se lo permitan - regresará a su casa, en el Palacio de la Zarzuela, que tanto echa de menos. El monarca pensó que su vuelta coincidiría con la Navidad, pero nada más lejos de la realidad. Con sus escándalos económicos más presentes que nunca, tanto el Gobierno como su hijo, el Rey Don Felipe, han considerado que, por el momento, el emérito debe continuar en la jaula de oro que se ha construido en los Emiratos Árabes.
En los cinco meses que lleva residiendo en Abu Dabi, el Rey ha llevado una vida tranquila y apenas ha abandonado la lujosa villa en la que se instaló poco después de su llegada. Pese a que recientemente se especuló con que estaba ingresado en el hospital debido a sus problemas de salud, la noticia fue rápidamente desmentida. Y, por fin, el pasado domingo veíamos la primera imagen de Don Juan Carlos tras instalarse en los Emiratos. En un puerto deportivo, vestido de modo elegante, sin olvidar la mascarilla quirúrgica y, sujeto por dos escoltas debido a sus evidentes problemas de movilidad, el emérito ha reaparecido más vulnerable y deteriorado que nunca.
Y hoy, en soledad y más lejos que nunca de España - el país que reinó durante 45 años - el Rey Juan Carlos cumple 83 años. El cumpleaños más triste del monarca, que todavía tiene abiertas tres diligencias con la Fiscalía para dirimir si cometió delito fiscal y blanqueo de capitales. Pero sus problemas legales serán de lo que menos se acuerde el emérito cuando, sin la compañía de su familia y a 5700 kilómetros de su casa, sople las velas de su tarta.
El último de estos problemas lo daba a conocer este lunes 'El Confidencial', que apunta a la ayuda que brindó Juan Carlos I en 2010 a Bruno Gómez-Acebo, hijo de su hermana Pilar de Borbón, para poner en marcha un fondo de capital riesgo para canalizar inversiones de firmas españolas en Emiratos Árabes.