La incidencia de la pandemia en España lleva varios días subiendo de nuevo. En en el último fin de semana ha escalado cinco puntos pasando de 95 el viernes a 100 este lunes. Se trata de un mal dato que en algunas comunidades como Cantabria o Valencia sube de forma vertiginosa. Para muchos, detrás de este repunte están los jóvenes. El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, así lo afirmaba este martes al asegurar que "el ocio descontrolado, los botellones colectivos y la falta de vacunas son un cóctel explosivo", como se ha demostrado con el macrobrote de Mallorca.
Que Feijóo tiene razón lo demuestra el que los contagios entre la población joven son ahora cuatro veces mayores que en el resto de la ciudadanía. Se trata del grupo de edad menos inmunizado por el momento dentro del plan de vacunación. Hasta ahora la prioridad apuntaba a los grupos de edad de mayor a menor y a los grupos de riesgo. Pero con el fin de restricciones como el uso de la mascarilla o la apertura de la hostelería, los comportamientos irresponsables de están multiplicando.
Se ha disparado la movilidad entre regiones y el ocio nocturno gana protagonismo facilitando situaciones de gran concentración de personas que no usan la mascarilla ni guardan las distancias de seguridad.
Desde el ministerio de Sanidad se pide "no estigmatizar a los jóvenes" porque, según palabras del director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, "era esperable" que aparecieran brotes al final de los cursos académicos: hay más interacción y se viene de año y medio de pandemia.
Sanidad quiere conseguir coberturas de vacunación elevadas, solapando los grupos etarios, para "meter en vereda" los incrementos de contagios que se están produciendo entre los grupos de población no vacunados, especialmente los más jóvenes a los que se pide un comportamiento responsable.
Más que grupos de edad, la clave para Sanidad es ver quién está vacunado y quién no y, aprovechando el aumento de dosis -seis millones de dosis llegan esta semana, en un nuevo récord-, quieren llegar "a todos", también a los más jóvenes y esperar la respuesta positiva, como del resto de la sociedad, de aceptación de la vacuna.
Según datos del ministerio que dirige Carolina Darias, hay un grupo ya vacunado con tendencia descendente que son los mayores de 80 y 70; otro grupo de 60 a 69 con una altísima cobertura y que bajan "pero un poco más suavemente", otro de 50 a 59 años con coberturas muy altas y claros descensos y el resto es "progresivo".
Aquí entran los de 40 y 49 años que se están "estabilizando" y el resto no vacunados, que tiene incidencias mayores.
Para los responsables de Sanidad, el macrobrote de Mallorca da un toque de atención que a la sociedad ya que los datos de contagios suponen un porcentaje "no desdeñable" del total de casos, alrededor del 2,5 por ciento de los casos de los últimos 14 días y del 5 por ciento de los últimos siete.
El propio Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias reconocía este lunes que "los cambios que estamos viendo son más suaves gracias al proceso de vacunación contra el coronavirus, si bien observamos que el sector de la población no vacunada, excepto los menores de 11 años, es donde se está produciendo un incremento real de la transmisión del coronavirus".