Aglomeraciones hubo. Sí. De nuevo, en Madrid. Entre la manifestación en contra de la construcción del hospital Isabel Zendal con gritos de fuera y vergüenza y el cúmulo de periodistas que querían escuchar cómo contestaba Ayuso sobre el plantón del presidente Sánchez y sus ministro en el acto la inauguración ha sido movida. El hospital de emergencias arranca de forma paulatina. En la fase inicial estará operativo uno de sus tres pabellones de hospitalización y se espera que los primeros pacientes con coronavirus derivados de otros centros comiencen a llegar en los "próximos días".
Cerca de un centenar de personas se han manifestado esta mañana frente al Hospital Isabel Zendal al grito de 'Ayuso dimisión' y 'más enfermeras, menos Valdebebas'. Así, el colectivo Sanitarios Necesarios ha organizado una manifestación frente al nuevo Hospital a favor de la sanidad pública y contra este centro "innecesario".
A la concentración se han unido diferentes representantes políticos como la portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid, Isabel Serra, y su homólogo en Más Madrid, Pablo Gómez Perpinyà. Por otro lado, se han acercado también varios vecinos en apoyo a la presidenta y al Hospital, algunos con banderas de España, que se encuentran en las inmediaciones de la concentración. La cúpula del PP ha arropado a Ayuso considerando el hospital como necesario e incluso Vox de la mano de Monasterio ha dicho que el hospital impedirá que ningún enfermo se quede a las puertas de la UCI.
El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha avanzado ante las críticas vertidas sobre un hospital sin pacientes ni médicos, que los profesionales del nuevo Hospital Enfermera Isabel Zendal, la que ha calificado de icono sanitario, llegarán a lo largo de esta semana y los pacientes la próxima. Y ha recordado que en el combate de la pandemia se vuelve a ver como un milagro.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, durante su discurso en la inauguración del nuevo hospital Isabel Zendal, ha lamentado la ausencia del ministro de Sanidad, de los portavoces del Partido Socialista, de Podemos y de Más Madrid en el acto. Ayuso ha recordado que se ha criticado a su Comunidad en numerosas ocasiones durante esta pandemia y que “al final el tiempo les ha dado siempre la razón", recordando la apuesta por los test de antígenos, controlar Barajas, o hacer test en las farmacias. “Nosotros estamos en la Comunidad de Madrid a salvar vidas”, ha dicho, “y un gran hospital público no puede ser una mala noticia para nadie”. “A no ser que el sectarismo político lo vea así”, ha concluido la presidenta de la Comunidad de Madrid.
Pablo Casado, le ha hecho durante la inauguración del Hospital Isabel Zendal, la joya de la corona de la gestión de la madrileña frente a la pandemia: "¿Aquí hay quirófanos?". Ante el silencio de la presidenta, al rescate de Ayuso ha acudido el director general de Infraestructuras Sanitarias, Alejo Joaquín Miranda de Larra. "Aquí hay salas de procedimiento", ha dicho, lo que los sanitarios llaman "salas de curas", según ha desvelado La Sexta.
La Comunidad ha reconocido que su coste se ha duplicado, pasando de los 50 millones estimados a los 100, y justifica que se ha debido a "la introducción de mejoras" que no se habían previsto en un principio. De hecho finalmente se han ampliado a 80.000 los 56.000 metros cuadrados estimados en el anteproyecto. El objetivo ha sido levantar un hospital "polivalente, versátil y sectorizable", para poder ser adaptado a cualquier crisis sanitaria y diseñado y organizado para "evitar el riesgo de contagio".
Más de 1.000 camas. Tres pabellones, de 10.500 metros cuadrados cada uno, albergarán 1.008 camas de hospitalización y 48 puestos de UCI, de los cuales 16 serán de cuidados intensivos y 32 de cuidados intermedios. Este martes se abrirá el módulo 2, con 240 plazas y todos los puestos de UCI. La Comunidad abrió a mediados de noviembre un procedimiento de adhesiones voluntarias de profesionales sanitarios para trabajar en el nuevo hospital. Se ofertaron los 669 puestos necesarios para esta primera fase pero solo 111 trabajadores cumplen con los requisitos y quieren ser trasladados. Ante esta situación, el personal se completará con parte de los 11.500 contratados por la pandemia que también serán derivados desde otros centros, en los que habrá menos actividad Covid.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, cree que el Gobierno de la Nación sabe "en su foro interno" que el Hospital Enfermera Isabel Zendal es "una buena noticia, aunque les cueste admitirlo". Así lo ha manifestado a su llegada a la inauguración de este nuevo centro hospitalario, del que ha apuntado que ni hay "sobrecostes" ni "nada que ocultar" y que "cualquier día es bueno para inaugurar cualquier infraestructura de carácter sanitario". "Los que dudan de si va a tener personal... hoy se abre y lo va a tener. Es incomprensible quien no se alegre de esto. Una nueva cama siempre es una buena noticia", ha señalado a continuación. Además, Almeida cree que la izquierda "debería reflexionar" tras sus críticas a la puesta en marcha del hospital, y le ha pedido que "conecte con la mayoría de la sociedad madrileña, y por esto no pasa".
El presidente del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid (ICOMEM), Manuel Martinez-Sellés, ha señalado este martes, con motivo de la inauguración del Hospital Enfermera Isabel Zendal, que "la apertura de un nuevo hospital público en Madrid, y más un hospital con una dotación de camas muy importante, es una buena noticia".
En declaraciones enviadas a los medios, Martinez-Sellés ha comentado que "además hay que destacar que este hospital se ha construido en muy poco tiempo y llega en un momento que es cuando empieza la parte más dura del invierno en el que, lo primero, no sabemos cómo va a evolucionar la pandemia, y en la que tradicionalmente tenemos en Madrid ya una situación importante de ingresos relacionados con la gripe".
El cardiólogo ha apuntado que Madrid tiene "una población muy envejecida que es particularmente vulnerable tanto al coronavirus como al virus de la gripe", por lo que ha afirmado que "este hospital puede ser de ayuda a la hora de permitir una descarga de los hospitales que en estas fechas pueden tener una situación de más presión asistencial". "Lo que está claro es que llega un momento que la presión asistencial es incompatible con la calidad asistencial", ha apostillado.
"Creo que sí es muy importante el saber cómo se va a articular este hospital y cómo se va a dotar de recursos humanos. Y también creo que es importante que esté claro los pacientes que se van a derivar, tanto pacientes con coronavirus pero también pacientes que sin tener coronavirus se puedan beneficiar o bien de pruebas diagnósticas o de procedimientos que se puedan realizar en el nuevo hospital", ha agregado.
A su juicio, "es pronto para saber cómo se va a organizar el hospital desde el punto de vista logístico", pero ha afirmado que "hay que estar vigilantes para asegurar que la organización es la adecuada". "En definitiva, creo que es un día para que todos los madrileños estemos contentos en el sentido que tenemos un aumento importante de la dotación hospitalaria que hay en este momento en Madrid", ha recalcado.
Asimismo, ha recordado que el Hospital Enfermera Isabel Zendal "es un hospital que, como se ha dicho, potencialmente puede ser de utilidad no solo para enfermos en Madrid sino también para enfermos de otras comunidades autónomas que en una situación de desbordamiento puedan necesitar una asistencia específica en este hospital".
UGT de Madrid no parece de acuerdo y ha manifestado este martes a través de un comunicado su intención de "exigir responsabilidades" por el "despropósito" del Hospital Isabel Zendal. En concreto, la organización sindical ha señalado la necesidad de rendir cuentas por "la autorización de un gasto desorbitado, al margen de todo criterio sanitario y con planteamientos tan peligrosos como la descapitalización de los recursos humanos tan necesarios en los hospitales actuales, para hacer una portada política populista y electoralista".
Según UGT, el Hospital Enfermera Isabel Zendal "adolece de los intereses económicos de los constructores en defecto del interés del beneficio comunitario de los madrileños", por lo que exige "explicaciones detalladas por parte de la Consejería de Hacienda de la Comunidad de Madrid". Por otro lado, ha subrayado que "el solo hecho de no haber reclutado un número mínimo de voluntarios para prestar servicios en el nuevo hospital pone de manifiesto el rechazo total de los profesionales de la sanidad a este proyecto". Así, ha exigido "la dimisión de los actuales responsables sanitarios y la rectificación de esta situación por parte del gobierno de Isabel Díaz Ayuso e Ignacio Aguado, y el respeto que se merecen los trabajadores de la sanidad y los ciudadanos de nuestra comunidad".
"Construir e inaugurar sin optimizar previamente todos los recursos es malgastar y destruir", ha sentenciado UGT, que sostiene que la gestión de la pandemia por parte del Gobierno regional "está muy alejada de cualquier criterio sanitario". Según ha expuesto, el nuevo hospital "ha sido ideado y construido sin la consideración y evaluación de las infraestructuras y recursos que el sistema público sanitario tiene a su disposición", así como "su posibilidad de crecimiento en número de camas" y "su optimización para un rendimiento eficiente". Además, ha afirmado que "el gran déficit de camas en los hospitales públicos de la Comunidad de Madrid ha sido propiciado por el propio gobierno de la misma".
Según los datos aportados por UGT, "se cerraron 1.600 camas en centros públicos entre 2010 y 2018, después de la rebaja que supuso que los siete nuevos hospitales construidos bajo la fórmula PFI se construyeron con capacidad para albergar 2.220 camas de hospitalización y en la actualidad, sólo tienen instaladas 1.801 (son 419 menos, casi la mitad de las que se prevén para el Hospital Enfermera Isabel Zendal)".
UGT ha agregado que la conveniencia de un nuevo hospital ubicado en la zona norte de Madrid "es más que discutible, porque hubiera sido mucho menos costoso y más rápido recuperar parte de las camas cerradas y espacios no utilizados en los hospitales públicos de la región (por ejemplo la torre 3 del hospital del Norte, la tercera planta del de Vallecas) e incluso haber acondicionado el antiguo hospital de Puerta de Hierro, ahora vacío y en estado de abandono".