El Gobierno ha aprobado este martes un anteproyecto para modificar la ley del Poder Judicial, del año 1985, que contempla un sistema público de becas de cuatro años de duración por el valor del salario mínimo interprofesional (SMI) para los opositores que quieran acceder a la carrera judicial y que prohibirá también la financiación privada de las asociaciones judiciales. Informan en el vídeo Miguel Mollá y Carla Infiesta.

La reforma cuenta con cinco prioridades, entre ellas aumentar el número de jueces y fiscales que acceden a la carrera judicial para "que haya efectivos suficientes para que la justicia sea ágil para que las cargas de trabajo sean razonables", ha explicado el ministro de Justicia, Félix Bolaños.

Esto se hará mediante diferentes vías. Una de ellas modificando el llamado cuarto turno, que permite el acceso a la carrera a aquellos que tengan 10 años de experiencia y hagan una prueba de acceso. 

Otra de las medidas consiste en blindar por ley las becas para los opositores y ampliarlas por lo menos cuatro años cobrando el salario mínimo. "No puede ser un impedimento la baja renta que tenga tu familia, si tienes talento, si te esfuerzas, si estudias, puedes ser juez y puedes ser fiscal", añadía Bolaños en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. 

La preparación de los opositores supone una dedicación casi plena en los estudios. Jaime es juez y ha tardado seis años en sacarse la oposición compatibilizando la preparación de oposiciones en los últimos años con trabajo en hostelería. Cree que esa medida le habría beneficiado.

"Me consta que otros compañeros míos de promoción también estaban trabajando a la vez que estudiando. Creo que es una medida muy positiva", opina. Unas becas que ayudarán a aquellos con menos recursos que quieran acceder a la carrera judicial.

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