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El portavoz del PP y vicesecretario de Cultura del PP, Borja Sémper, ha exigido este viernes al PSOE aplicar con la presidenta del Congreso, Francina Armengol, la misma vara de medir que utilizó con el exministro José Luis Ábalos ante conductas "no ejemplares" y que incluso pueden ser constitutivas de delito. A su entender, la expresidenta del Congreso está "inhabilitada políticamente" y no puede seguir como presidenta de la Cámara sino que debe dimitir inmediatamente.
La portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados, Pepa Millán, ha defendido también que Francina Armengol está "inhabilitada" para seguir ejerciendo su cargo de presidenta de la Cámara baja, y "no puede seguir ni un minuto más" al frente de dicha responsabilidad.
El papel de José Luis Ábalos como intermediario se ciñe a un contrato con el Gobierno de Baleares en 2020, en la época de Francina Armengol. La presidenta autonómica habría avalado a la trama Koldo sabiendo que las mascarillas eran defectuosas, según El Mundo. El subdirector de compras de la Consejería de Salud de las Islas Baleares –hoy gobernadas por el PP- certificó en 2020 como apto un lote de protección contra el covid que, sin embargo, no cumplía los estándares, según el diario El Mundo. De esta forma, Armengol habría avalado a la trama de Koldo, sabiendo que esas mascarillas eran defectuosas. Las mascarillas se facturaron al gobierno balear de Francina Armengol por valor de 3.700.000 euros.
Según recoge el reglamento del Congreso de los Diputados, en su sección segunda, la marcha de Armengol abriría un nuevo espacio para decidir el que será el nuevo presidente o presidenta de la Cámara Baja. En el artículo 38 se detalla que habría que repetir la votación, con nuevos candidatos para presidir el Parlamento nacional. "Las vacantes que se produzcan en la Mesa durante la legislatura serán cubiertas por elección del Pleno en la forma establecida en el artículo anterior, adaptado en sus previsiones a la realidad de las vacantes a cubrir", recoge la norma.
Como hace unos meses, cada diputado debería escribir sólo un nombre en la papeleta. "Resultará elegido el que obtenga el voto de la mayoría absoluta de los miembros de la Cámara. Si ninguno obtuviera en primera votación dicha mayoría, se repetirá la elección entre los que hayan alcanzado las dos mayores votaciones y resultará elegido el que obtenga más votos", señala el artículo 37.
Asimismo, en caso de empate, "se celebrarán sucesivas votaciones entre los candidatos igualados en votos hasta que el empate quede dirimido".
Al igual que ocurrió con el nombramiento de Armengol, el PSOE tendría que volver a negociar para conseguir la mayoría suficiente y así conservar la presidencia de la cámara baja.
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