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El PSOE exigirá a José Luis Ábalos que mantenga la disciplina de voto en el Congreso de los Diputados a pesar de que ha abandonado el grupo parlamentario socialista y se ha ido al grupo mixto, lo que le ha acarreado una suspensión cautelar del partido.
Pese a todo, la dirección del PSOE sostiene que Ábalos debe votar en el mismo sentido que sus excompañeros de bancada y además tiene que seguir abonando las cuotas del partido hasta que la decisión sobre su expulsión sea definitiva.
La Ejecutiva Federal del PSOE dio en la víspera un ultimátum de 24 horas a Ábalos --exministro y exsecretario de Organización-- para que entregase el acta de parlamentario al considerar que tiene "resonsabilidades políticas" en el 'caso Koldo' que investiga presuntas mordidas en contratos de compra de mascarillas durante la pandemia de coronavirus.
Después de la detención de Koldo García Izaguirre, asesor de Ábalos durante su etapa al frente del Ministerio, la dirección del PSOE le presionó para que diese un paso a un lado y le marcó un plazo de un día para que dejase su escaño. Sin embargo éste se resistió, volvió a defender su inocencia y anunció que seguirá como diputado desde el grupo mixto, un desafío al que Ferraz respondió de inmediato con una expulsión cautelar.
En el documento, firmado por el actual secretario de Organización, Santos Cerdán, se detalla la apertura de un expediente disciplinario y la suspensión cautelar de militancia. El texto indica además que hasta que la suspensión cautelar se resuelva, el expedientado debe "respetar las decisiones políticas de los órganos de dirección del partido" y también está obligado a seguir pagando las cuotas a tiempo.
"La suspensión de afiliación deja sin efecto los derechos y los deberes del afiliado/a, salvo la obligación de abonar puntualmente las cuotas y de respetar las decisiones políticas de los órganos de dirección del Partido. La suspensión cautelar de un/a afiliado/a que ocupe un cargo orgánico implicará la suspensión temporal del mismo en el ejercicio de sus responsabilidades hasta el momento la resolución del expediente en cuestión", indica el documento.
En este sentido, fuentes de la dirección del PSOE confirman a Europa Press que esto significa que Ábalos continuará sujeto a la disciplina de voto socialista hasta que se produzca la resolución definitiva de su expediente.
A este respecto, fuentes parlamentarias esperan no tener que negociar con Ábalos para que vote en la misma línea que sus excompañeros. Pero en todo caso indican que esa no es una preocupación ahora, y que la prioridad pasaba por atajar el asunto cuanto antes.
En caso de votar en sentido distinto, Ábalos se enfrentaría a un multa económica y además podría tener consecuencias en la resolución de su expediente, en caso que decida recurrir su expulsión. El último precedente es el de la exdiputada y recién nombrada presidenta del Consejo de Estado, Carmen Calvo, que tuvo que pagar 600 euros, la máxima que prevé el reglamento interno, por romper la disciplina de voto y abstenerse ante la Ley Trans el 22 de diciembre de 2022.
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