El presidente de Castilla-La Mancha y secretario general de los socialistas de esta región, Emiliano García-Page, ha reivindicado que "la camiseta del PSOE es la de la libertad" y ha asegurado que "lucha por que Puigdemont no le termine de colocar una camisa de fuerza a todas las instituciones del Estado". Lo ha hecho tras las críticas vertidas contra él por María Jesús Montero, que le recriminó que se alegrara de la victoria del PP en Galicia porque lo contrario habría sido la victoria de Puigdemont. La vicepresidenta le recriminó que no se pusiera la camiseta del PSOE.
García Page ha respondido y ha alertado de que uno de los problemas que tiene el país es el frentismo y el populismo que, a modo de placebo, intenta dar solución a los problemas.
Por ello, ha pedido que el PSOE vuelva a ser el partido de los "grandes consensos" porque "nunca ha sido ni populista ni frentista", al tiempo que ha lamentado que hay quien considere un "sacrilegio" poder hablar de estas cuestiones, como él hace. "No te dejan. Enseguida te echan".
"Yo, como presidente de Castilla-La Mancha, la única camiseta que tengo es la de mi tierra. Pero como animal político, si quieren, como persona concienciada políticamente, yo siempre he tenido una sola camiseta, desde mucho antes de los que ahora las reparten. Siempre he tenido la misma camiseta. Y además he defendido la camiseta hasta el punto de conseguir siempre algún que otro trofeo", ha defendido García-Page.
"La camiseta del PSOE, y eso lo aprendí de niño, no es una camisa de fuerza, sino de libertad, donde además se pueden decir las cosas con el ánimo de mejorar. Es más, lucho por que Puigdemont no le termine de colocar una camisa de fuerza a todas las instituciones del Estado", ha insistido el presidente castellanomanchego, que ha criticado que se "esté poniendo de moda" que le "insulten".
"Se está poniendo de moda contestar a argumentos políticos con ofensas o con insinuaciones un tanto ofensivas. Eso no lo voy a hacer", ha asegurado.