En Suiza se reúnen hoy dirigentes socialistas y de Junts encabezados por Carles Puigdemont para negociar los términos del acuerdo en el que se decidirán varios aspectos que pueden afectar al futuro de España. Sabemos que hay uno o más verificadores internacionales y que se tratarán asuntos como un referéndum de independencia, la financiación de Cataluña y los detalles de la amnistía.
El hermetismo era palpable en las horas previas. También de los equipos negociadores a su llegada anoche a la ciudad suiza de Ginebra. Se mantiene también, de momento, este sábado en el que sólo trasciende oficialmente que las delegaciones de PSOE y Junts, con Puigdemont entre ellos, se han reunido desde las 10:00 horas de la mañana con la presencia de un verificador internacional.
Extraoficialmente se apunta que esa mediación, por la desconfianza mutua según ambas fuentes, la estaría llevando a cabo la fundación Henry Dunant, especializada en conflictos internacionales armados y políticos, que ya ha estado presente en el proceso de disolución de ETA y la mesa de diálogo del Gobierno central con Esquerra hasta su ruptura con Junts en la Generalitat.
Primera reunión desde la investidura, sin luces ni taquígrafos públicos y con planteamientos de máximos desde el partido independentista: referéndum y 100% de la financiación autonómica.
El Centro para el Diálogo Humanitario, con sede en Ginebra, ha sido el acordado por PSOE y Junts para "acompañar" sus negociaciones sobre el futuro político de Cataluña fruto del pacto que permitió la investidura de Pedro Sánchez.
La cuestión es que en esta ocasión no son dos países o dos facciones en guerra, sino partidos de un país democrático como España, que se citan en el extranjero y ante un mediador para tratar de resolver "un asunto doméstico", no deja de insistir el Gobierno.
Organismos como la Comisión de Verificación Internacional o el mismo Centro para el Diálogo Humanitario tuvieron un papel en la escenificación del fin de ETA. Expresidentes como Zapatero o González han ejercido una labor mediadora en conflictos internacionales como el de la dictadura venezolana y sus opositores, o el del gobierno colombiano y las guerrillas. Nada que ver con la internacionalización ahora del conflicto con el independentismo catalán.
Paradójico que la mediación en este caso recaiga en un organismo que lleva en su nombre el de Henry Dunant, primer premio Nobel de la Paz, como fundador del Comité Internacional de la Cruz Roja, surgido a finales del siglo XIX para socorrer a los soldados heridos en las guerras sin importar su bando.
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