¿Quién es Tesh Sidi, la ‘olvidada’ en la lectura de los diputados de la nueva legislatura en el Congreso?

Tesh Sidi se ha convertido involuntariamente en protagonista de una de las anécdotas de la sesión constitutiva de la Mesa del Congreso para esta XV Legislatura, en la que Francina Amengol, candidata del PSOE, ha sido elegida presidenta de la Cámara Baja.

De 29 años, ella ha sido la única ‘olvidada’ en la lectura de los diputados que ha efectuado Cristina Narbona, quien ha presidido la Mesa de Edad que ha dirigido la esperada sesión.

“Perdone. ¿No ha sido nombrada? ¿Cuál es su nombre?, ha preguntado tan pronto como se ha dado cuenta de la situación, pidiendo disculpas.

“Tesh Sidi”, ha dicho ella, tras lo cual Narbona inmediatamente ha contestado: “Muchas gracias, diputada”, a lo que la joven ha replicado con un “a ti”, esbozando una sonrisa.

“De acuerdo. Se ha corregido el fallo en la lectura. Está usted dentro del hemiciclo”, ha dicho después la presidenta de la Mesa de Edad tras unos segundos, provocando otra señal de agradecimiento de la diputada.

Tesh Sidi, la primera diputada saharaui en el Congreso de los Diputados

Nacida en Tindouf, Algeria, en un campamento de refugiados saharaui, Tesh Sidi es de hecho la primera diputada saharaui en el Congreso. Criada por su abuela en Mauritania entre los cuatro y siete años, fue a los 12 cuando recaló en Alicante gracias al programa 'vacaciones en paz', tal como contó en una entrevista a Mundo Negro. Allí vivó con una familia de acogida con la que ya había compartido algunos veranos, y fue más tarde, al alcanzar la mayoría de edad, cuando les dejó para emprender sus estudios.

Hoy, como se ha encargado su formación de recordar al producirse la inesperada anécdota en la sesión constitutiva en el Congreso de los Diputados, Tesh Sidi, es ingeniera informática, experta en Big Data y diputada por Más Madrid; la primera diputada saharaui en la Cámara Baja.

Firme defensora de los derechos humanos, el feminismo, la sanidad pública, la educación y la lucha contra el racismo, entre otras causas como dar voz al pueblo saharaui, a través de las redes sociales se ha hecho eco de lo sucedido con la misma espontaneidad con la que ha expresado su agradecimiento tras el fallo en la lectura: “Algo me tenía que pasar”, ha escrito, acompañando la publicación del vídeo del momento y un ‘emoji’ con una cara llorando de la risa.