En un cambio de estrategia del PSOE, los contactos entre los socialistas y el resto de formaciones políticas se aceleran para intentar sumar el máximo de apoyos que permitan a Pedro Sánchez revalidar el Gobierno de la nación. Los independentistas tienen la llave y en este sentido el president de la Generalitat ha urgido a Sánchez a que se "mueva rápido" para conseguir el apoyo de los partidos independentistas y tome la iniciativa si quiere continuar en Moncloa.
Aragonés le ha instado a "cumplir" con la agenda catalana sin miedo a la derecha y la extrema derecha porque lo conseguido en estos últimos cuatro años según él es "insuficiente". El objetivo sigue siendo un referéndum para "resolver" el conflicto. Ese es el precio si Sánchez quiere ser investido y el que los socialistas se niegan a pagar.
"Pedro Sánchez tiene que moverse. Si quiere ser investido presidente tendrá que buscar los apoyos para ello. Es a él a quien corresponde hacer propuestas y conseguir los votos", advertía el president que se ha atribuido la 'medalla' de haber frenado a la derecha y la extrema derecha desde Cataluña en las elecciones del 23J.
"El objetivo es votar y que se acabe la represión", ha reclamado una y otra vez en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el último hasta la vuelta del verano. El president catalán reconoce que las conversaciones están dando sus primeros pasos y confirma que de momento no se ha abierto una negociación formal con Sánchez con propuestas concretas encima de la mesa.
Pero Aragonès no ha dirigido sólo sus mensajes al secretario general de los socialistas. También ha habido recado a Junts a los que pide "aprovechar al máximo" la oportunidad que les ha brindado el resultado electoral del 23J y sumar fuerzas para conseguir ese objetivo de referéndum y "acabar con la represión"
"Los resultados de las elecciones generales suponen aprovechar la oportunidad", ha conminado a Puigdemont aunque sin nombrarle expresamente.
Aragonés ha fijado también como objetivos acabar con los "déficits" que según él lastran el crecimiento en Cataluña como el déficit fiscal, de infraestructuras o servicios públicos. En este sentido ha reclamado una negociación bilateral con el Gobierno de la nación para abordar la financiación de la comunidad sin interferencias de otros territorios. "No iremos a defender una financiación de la mano de Ayuso y García-Page", ha querido dejar claro.
La ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, ya ha puesto encima de la mesa la financiación de Cataluña y una posible quita de la deuda para intentar sumar apoyos a la investidura de Pedro Sánchez. El PSOE deja fuera el referéndum -que el president de la Generalitat ha vuelto hoy a reclamar con insistencia- y la amnistía que exige Puigdemont. Una palabra que Aragonès hoy no ha pronunciado y ha preferido utilizar la expresion "acabar con la represión".