Recta final de campaña. Hoy tocaba hablar de deporte y en plena polémica por los insultos racistas al jugador del Real Madrid Vinícius en Mestalla el pasado fin de semana el líder del PP se ha mojado entrando de lleno en el debate. "España no es un país racista en ningún caso", ha afirmado Alberto Núñez Feijóo.
Una afirmación que comparten los candidatos del PP. Ayer Isabel Díaz Ayuso fue más allá y apuntó que "esto mismo ocurre" también con las "ofensas contra el rey y contra otras muchas personas" que se producen en los terrenos de juego. Feijóo ha preferido acotar en cambio la polémica al campo exclusivo del deporte.
En este sentido el gallego ha subrayado que "el deporte es educación y la educación es lo contrario al racismo". Unas declaraciones que se producían en un acto electoral con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, y el tío de Rafa Nada, Toni Nadal, uno de los fichajes estrella de la fundación del PP, Reformismo 21.
Almeida esta vez ha resistido la tentación de agarrar una raqueta y los asistentes se lo han agradecido vivamente dados los antecedentes del alcalde con las pelotas y los accidentes. Centro de todas las chanzas Toni Nadal ´-reconocido madridista- se ha burlado de su espíritu sufridor como seguidor del Atlético de Madrid. "Estás acostumbrado a perder muchos años", le ha espetado. Una frase que en plena carrera electoral tiene su aquel pero que Almeida se ha tomado con deportividad.
El presidente del PP que sigue aferrado en su idea de que gobierne la lista más votada hoy señalaba que "lo importante no es ganar a cualquier precio y de cualquier forma". Feijoo ha dicho que a él le gustaría tener en el Gobierno a personas a las que pueda "admirar" y no a "sectarios", que "pacten" y que "no jueguen en corto" en referencia a la composición en el actual Consejo de ministros.
Me gustaría tener en el Gobierno gente a la que admirar. Cuando tienes en el Gobierno a nadie a quien admirar o respetar es malo para el país porque has de acordar y para acordar tienes que tener gente que no sea sectaria", aseguraba.
Feijóo también ha mostrado su perplejidad porque se haya instalado la idea de que la cultura del esfuerzo "es de derechas".