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El buen tiempo que está haciendo desde que arrancó la Semana Santa está dejando el letrero de 'lleno total' de turistas en la mayoría de playas y zonas de montaña de toda España y, además, está acompañando a las cofradías a poder vivir el fervor religioso y salir en procesión por las calles de las ciudades. Un auge de visitantes que el sector hotelero espera que se prolongue hasta el verano.
Cientos de miles de personas han participado este Viernes Santo en infinidad de procesiones, algunas de varias horas de duración. La famosa 'Madrugá' de Sevilla concluyó a primera hora de esta tarde, cuando se han recogido las cofradías de los Gitanos, de la Macarena y de la Esperanza de Triana.
Aparte de las procesiones, otras tradiciones inundan estos días las calles, como ocurre en la localidad de Calanda (Teruel) y la 'rompida de la hora', en la que miles de cofrades, ataviados con túnica morada, hacen estremecer cada año a los presentes tocando bombos y tambores con un ruido atronador.
Son días de gran fervor religioso pero también, por supuesto, de turismo. Por ello, vemos cafeterías, restaurantes, playas y otros lugares de descanso abarrotados con hoteles que superan ampliamente el 80 ó 90% de ocupación.
Un movimiento similar a los años anteriores a la pandemia de covid pese a la inflación y a que hay que rascarse más el bolsillo para los alojamientos en la mayoría de las comunidades. Estampas de verano a primeros de abril ante una Semana Santa que se prevé de récord. De la arena de Sitges, Valencia o Mallorca, a las terrazas repletas de gente.
También se nota en la capital, Madrid, donde pocas veces se ven las calles de sus barrios tan vacías. Y el centro, sitios tan emblemáticos como la Plaza Mayor, se llena de turistas tanto nacionales como internacionales.
La recuperación de la demanda turística en lo que va de año, las expectativas de afluencia en Semana Santa y las buenas perspectivas de negocio para los próximos meses han dejado en mínimos el número de establecimientos cerrados en Málaga, Cádiz, Almería, Huelva y Granada, según un análisis de Comisiones Obreras (CCOO).
Un total de 365.100 vehículos, el 96,1% de los previstos, han abandonado el área de Barcelona entre el mediodía del jueves y las 15:00 horas de este viernes en la operación salida de Semana Santa, que ha finalizado con un muerto en accidente y con un pico de retenciones en varios tramos que han sumado 150 kilómetros.
Según ha informado el Servicio Catalán de Tráfico (SCT), entre las 15:00 horas del jueves y la misma hora de este Viernes Santo han salido de la corona metropolitana de Barcelona 365.100 vehículos, el 96,1% de los 380.000 previstos y un 3,2% menos que el año pasado, si bien la víspera por la mañana hubo conductores que anticiparon la salida.
A lo largo de la mañana de este viernes las principales retenciones se han acumulado entre las 11:00 y las 13:00 horas, especialmente en la franja de las 12:00 horas, que ha sido la hora punta de salida, con 30.000 vehículos abandonando la corona metropolitana.
Pese a que la mayoría de retenciones se han concentrado en la AP-7, esta autopista libre de peaje ha registrado en esta operación salida un 38% menos de retenciones que el pasado año.
En lo que va de Semana Santa, 21 personas han perdido la vida en 16 accidentes mortales en las carreteras españolas.