Muchas ayudas se quedan sin repartir por desconocimiento, por dejadez o porque se hace difícil solicitarla

España acaba de recibir otros otros 6.000 millones de euros, el tercer desembolso de fondos europeos, para los planes de recuperación. Y esto cuando en nuestro país acaba el plazo para pedir la ayuda de los 200 euros para las personas con rentas más bajas. Una de las medidas anticrisis estrella del Gobierno, que no ha llegado a todos muchas veces por desinformación y otras razones, que alejan a los necesitados de las prestaciones y ayudas.

El cheque de 200 euros aprobado por el Gobierno para las rentas por debajo de 27.000 euros lo han solicitado 2.700.000 personas, el 64% de quienes podrían haberlo cobrado por desconocimiento, por falta de capacidad tecnológica o por una tramitación, que a veces parece una carrera con obstáculos. Muchos se quedan sin recibirlas, porque ni siquiera las solicitan.

Algunas personas con derecho a prestaciones sociales ni siquiera tienen ordenador o una conexión a internet para realizar la solicitud. A veces, tampoco la competencia informática para ello. Por eso muchas ongs ayudan con los trámites, que no siempre son sencillos por la cantidad de documentos que se solicitan, entre otras dificultades que pueden surgir en el proceso de solicitud.

Con el bono cultural joven ha ocurrido parecido: se se podía solicitar por la web o en correos, ha pasado lo mismo. Miles de jóvenes ni siquiera lo solicitaron. En 2022 lo cobraron 281.000 jóvenes que cumplían 18 años, una cifra que ni siquiere supone el 60% del total de los que podían solicitarlo. 

Así lo reconoce este joven: "Tengo amigos que les daba pereza o se les ha pasado el plazo". Hay gente a la que le "ha dado perecilla lo del certificado digital, pero el proceso es muy intuitivo".

Mientras tanto, sigue aumentando el número de beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital que ya da cobertura a más de 1.700.000 personas. Tendría que superar los 2 millones.

El autobús del ministerio de Seguridad Social ha recorrido desde octubre todo el país para informar a posibles beneficiarios de esta ayuda. Así miles de personas se han enterado de que podían pedirla y han recibido orientación para hacerlo.