Podemos se queda solo frente a Yolanda Díaz: mantiene el pulso con las primarias y no estará en la foto de Sumar

La puesta de largo de Sumar se acerca y Podemos no estará en la foto de la unidad que busca Yolanda Díaz en la presentación oficial de su candidatura a las elecciones generales de diciembre. Los morados se han enrocado en su exigencia de que la vicepresidenta firme por escrito un acuerdo con ellos para celebrar primarias abiertas para elegir a los candidatos de las listas electorales y van a mantener el pulso hasta el último momento. Se han quedado solos imponiendo esa condición previa para poder acudir al acto de este domingo en el Pabellón Magariños de Madrid.

El resto de fuerzas políticas situadas en el espacio a la izquierda del PSOE quiere aparcar ese debate hasta después del 28-M y exige tener capacidad de decisión en la definición de esa votación interna. Sumar ha ofrecido a Podemos una declaración política comprometiéndose con las primarias pero dejando claro que los detalles concretos se acordarán entre todos de forma multilateral. Propuesta que a los morados no les vale. Mientras, en un continuo goteo, esos partidos minoritarios y sus principales dirigentes se han ido sumando y confirmando su asistencia al acto para arropar a la vicepresidenta.

Yolanda Díaz, que habla de "muchísimas" fuerzas, se lo ha agradecido y tras varios días de silencio ha hecho un llamamiento a Podemos para "sumar a favor". "Me encantaría que a ese acto asistan muchas personas de Podemos y por supuesto su secretaria general". Recado para Ione Belarra que no ha recogido el guante. Al revés, pone toda la presión sobre la vicepresidenta. "Yolanda Díaz tiene en su mano la unidad", ha dicho la secretaria general de Podemos desde Canal Red, la tele que dirige Pablo Iglesias que estos días está marcando el paso y la estrategia de los morados. "Está en manos de Yolanda Díaz", ha sentenciado Irene Montero.

En Podemos no van a dar un paso atrás porque consideran que lo que están pidiendo es simple, sencillo y asumible. Un acuerdo de "mínimos" que establezca unas reglas del juego claras en el proceso y que pasa por la celebración de esas primarias abiertas en las que puedan participar todos los ciudadanos que quieran y que les daría ventaja a la hora de conformar las listas porque sus bases son mayoritarias y está muy movilizadas frente a las del resto de las formaciones.

Fuentes de Sumar sostienen que el movimiento es imparable y están convencidas de que la foto de este domingo va a ser muy clara. Se visualizará que una gran mayoría de esos partidos arropa a Díaz en su lanzamiento como candidata. Es la fuerza que exhibirá la vicepresidenta frente a la soledad de Podemos que deberá explicar su ausencia. En cualquier caso intentan restar trascendencia a la decisión de Belarra de cara al futuro. El diputado de Izquierda Unida, Enrique Santiago, cree que después del domingo quedan meses hasta las elecciones para superar las discrepancias.

La dirección de Podemos ha dado la orden de no asistir y señala que quien acuda a Magariños lo hará a título personal. Pero entre sus filas empieza a haber movimientos. Los líderes del partido en Galicia y Navarra no seguirán las directrices de Belarra y estarán el domingo escuchando a Díaz. La última en unirse ha sido la coordinadora del partido en Navarra y candidata autonómica, Begoña Alfaro, que argumenta que no hay otra posibilidad que un proyecto con todas las fuerzas de progreso encabezado por Yolanda Díaz. Unos días antes había hecho lo propio el coordinador de Podemos en Galicia, Borja San Ramón. 

Hay algunos diputados morados que también arroparán a Díaz en ese acto simbólico como Txema Guijarro y Gloria Elizo. Otro de los nombres que en las últimas horas ha mostrado su apoyo es el actual vicepresidente del Gobierno de Baleares , el juez Juan Pedro Yllanes. En Twitter ha escrito que "solo con el acuerdo y el concurso de todas las fuerzas progresistas lograremos otra legislatura para profundizar en los derechos de la ciudadanía".

La lista de asistentes va aumentado. Allí estarán la alcaldesa de Barcelona y líder de los comunes, Ada Colau; el ministro Alberto Garzón con toda la cúpula de Izquierda Unida; el número uno de Más País, Íñigo Errejón; las candidatas de Más Madrid, Mónica García y Rita Maestre y los representantes de otros partidos más pequeños y de ámbito regional como Compromís, la Chunta Aragonesista o Proyecto Drago liderado por el exdiputado de Podemos Alberto Rodríguez.

"Vamos a dejar que el proyecto de Yolanda vuele sin poner plomos en las alas porque es bueno para el país y tiene que recuperar ese espacio progresista", ha afirmado Mónica García que ha incidido en que su partido apoya a Díaz "sin condiciones ni presiones".

Podemos es el partido más fuerte de ese espacio y quiere amarrar ya las primarias abiertas para garantizar que su peso esté reflejado en una futura candidatura. Son su baza fundamental para conseguirlo y su posición, al menos de momento, es inamovible. Las dos cabezas visibles del partido, Ione Belarra e Irene Montero, siguen apretando las tuercas a Díaz.

Belarra "no entiende" porqué la ministra de Trabajo no quiere comprometerse con Podemos y deja caer que puede obedecer a los acuerdos que Díaz tenga con otras fuerzas. Para Podemos "la llave" de la unidad la tiene la vicepresidenta y reivindican que la unidad no se construye en los despachos. El caso de Andalucía es el ejemplo al que recurre Podemos para proclamar que no se puede volver a repetir. A juicio de Belarra fue un "absoluto despropósito". En aquella ocasión Podemos, IU y Más País conformaron la coalición 'Por Andalucía' con unas negociaciones muy tensas y polémicas, con una candidata - la que propuso Yolanda Díaz- que no pasó por primarias y que fracasó en las urnas. "Cuidar la identidad de Podemos" en la reagrupación de la izquierda es otro de los ejes de la dirección defendido por Irene Montero que apuesta por cerrar el acuerdo para pasar a la ofensiva en el ciclo electoral.

Nadie se mueve y tanto el Gobierno como el PSOE contemplan el tablero con inquietud porque saben que lo que ocurra a su izquierda es clave para las aspiraciones de Pedro Sánchez de repetir el Gobierno de coalición. Fuentes de Moncloa consideran que Podemos no va de farol con sus exigencias y que la tensión entre las partes es seria. Están convencidos de que los morados están haciendo cuentas y valorando qué es lo que más rentabilizan.