Las claves de la operación Santana, que ha llevado a María Gámez a dimitir como directora de la Guardia Civil
Isabel SanzMadrid
María Gámez, exdirectora de la Guardia CivilEuropa Press
Se trata de un caso vinculado a los ERE de Andalucía y de traspaso de fondos públicos a empresas relacionadas con el marido de Gámez
Juan Carlos Martínez y su hermano Bienvenido eran administradores de empresas que recibieron dinero público
El cuñado de Gámez, Bienvenido Martínez, era a la vez directivo de IDEA, una de las agencias de la Junta de Andalucía desde la que se distribuían las ayudas
Este miércoles sorprendía la repentina dimisión de María Gámez como directora de la Guardia Civil, el cargo que ocupaba desde enero de 2020. Ella misma lo comunicó, rodeada de altos mandos de la Benemérita, y explicó que lo hacía porque su marido había sido citado por un juez en el marco de la investigación de la operación Santana.
Se trata de un caso vinculado a los ERE de Andalucía. Por el momento, ella no aparece vinculada al caso y según explicó la propia Gámez, abandonaba la dirección del Instituto Armado para proteger a su familia, a la propia Guardia Civil y al Gobierno del que ha formado parte.
Su jefe, Fernando Grande Marlaska compareció para comunicar que había aceptado la dimisión "injusta pero necesaria" para cumplir con los estándares de profilaxis democrática que marca el Ejecutivo de Pedro Sánchez e hizo una intensa defensa de la hasta ayer directora de la Guardia Civil.
¿Por qué está investigado su marido?
El juez José Ignacio Vilaplana investiga una inyección de fondos públicos a dos empresas en las que el marido de Gámez, Juan Carlos Martínez, y su hermano Bienvenido eran parte, aunque ese dinero no se pagó directamente. Los dos tenían cargos en sociedades públicas de la Junta de Andalucía en aquella época.
Bienvenido Martínez, hermano del marido de Gámez era director de inversiones estratégicas en IDEA, la agencia pública de la Junta de Andalucía que se encargó de parte de la distribución de ayudas a empresas en crisis, la clave del caso de los ERE.
En esa época, Bienvenido Martínez también fue, primero presidente, y luego consejero de la extinta fábrica de automóviles Santana Motor en representación de la empresa pública IDEA
Santana Motor pudo recibir hasta 137 millones de euros de la Junta de Andalucía hasta que terminó de liquidarse en 2011 y a su vez hizo elevadas inyecciones económicas en la empresa administrada por él, Experience Management Group. Su presencia en los dos lados de las ayudas -el de la distribución y el de la recepción- es para la UDEF una "manifiesta irregularidad".
Entre 2009 y 2011, Santana Motor inyectó 339.701 euros en favor de la consultora Experience Management Group, administrada por Bienvenido Martínez.
La misma compañía recibió medio millón de euros de Laboratorios Farmacéuticos Rovid, receptora seis millones de euros públicos desde IDEA
Hay otro contrato desde la Junta por asesoría desde 2009 que supuso otro medio millón de euros en concepto de "asistencia técnica y asesoramiento" que según el juez "no habrían existido".
Por su parte, Juan Carlos Martínez fue directivo de las sociedades públicas andaluzas INCUBA, SOPRESA Y FAGIA.
Además, era administrador de Job Management Management Liberty SL, que recibió fondos desde la compañía de su hermano, Experience Management Group.
El juez quiere saber si se lucró injustamente y pone la lupa en el aumento de su patrimonio, con compras inmobiliarias de un millón de euros en tres años.
Hay un tercer hermano, Manuel, que también fue directivo de la empresa Be Make Create, otra empresa que recibió 128.000 euros, pero que no está citado.
Tanto Juan Carlos como Bienvenido Martínez están investigados por tres delitos:
Blanqueo
Prevaricación administrativa
Malversación de fondos públicos
¿Está implicada Gámez?
Ningún auto judicial la señala, al menos por ahora. Su dimisión llevó a los periodistas a preguntar a Fernando Grande Marlaska si se esperaba alguna citación y él se mostró seguro de que eso no iba a ocurrir.
Según el ministro, Gámez sale de la dirección de la Guardia Civil para cumplir con los elevados niveles de profilaxis democrática impuestos por el Gobierno de Pedro Sánchez.
Con su marido investigado y con dos citas electorales este año, Gámez se habría convertido en un flanco débil y en un blanco fácil de la oposición.
La operación Santana, en un momento difícil para la Guardia Civil
Mercedes González será la nueva directora de la Guardia Civil, y tendrá que lidiar con otros casos que salpican al cuerpo fundado por el Duque de Ahumada y conocidos poco antes de la dimisión de Gámez.
Caso Cuarteles: se investiga la adjudicación a un solo constructor de las obras de reforma en 13 cuarteles de la Guardia Civil. Además del constructor, Ángel Ramón Tejera, se investiga a tres mandos de la Guardia Civil:
El teniente general Pedro Vázquez Jarava, jefe del mando de Apoyo e innovación que se encargaba de contratar los suministros y los servicios para la Benemérita.
El coronel José María Tienda: era el efe de la comandancia de Santa Cruz de Tenerife. Desde allí encargó al constructor obras que costaron decenas de miles de euros.
El teniente coronel Carlos Alonso, que según la investigación, también realizó y autorizó pagos por hasta 120.000 euros en varios cuarteles cuando era jefe de la comandancia de Ávila.
Caso Mediador: fue el que destapó el caso Cuarteles.
El general Francisco Espinosa está investigado por la trama en la que también hay un diputado socialista, su sobrino y un intermediario, Navarro Taroconte.
Presuntamente daban trato de favor a empresarios que les pagaban morididas.