Pedro Sánchez ha reunido a sus diputados y senadores en uno de los momentos más delicados y tensos en el Gobierno de coalición por la reforma unilateral del PSOE de la ley del `sólo sí es sí'. En su primer discurso a los suyos en este periodo de sesiones y en plena polémica con sus socios de Podemos, el presidente del Gobierno no ha esquivado el asunto nada más empezar su intervención. Ha defendido que "es una buena ley" que supone un avance en la protección de los derechos de las mujeres, pero también ha admitido que "lo cierto y verdad es que existe un problema".
El presidente no ha dicho nada sobre la salud de su Ejecutivo y ha reivindicado la reforma de la ley más emblemática de Irene Montero. Ha explicado que el PSOE utiliza el diálogo pero una vez constatado que desde su aplicación se han producido esas rebajas de penas se ha preguntado de forma retórica: "¿Qué se hace cuando hay un problema en la aplicación de una ley?". Su respuesta ha sido clara: "Utilizar el diálogo, pero resolver el problema". Unas palabras que han provocado los aplausos de los parlamentarios socialistas.
"Vamos a hacer lo que hay que hacer, lo que es de sentido común, lo que es correcto. Defender el gran avance que supone la ley y también corregir el problema para que en el futuro no se vuelva a producir ni una sola rebaja de condenas", ha proclamado Sánchez.
En su análisis ha reconocido que la ley que elaboró el Ministerio Igualdad "ha tenido efectos indeseados en su aplicación y me quedo corto" y ha subrayado que ni el Gobierno ni los grupos parlamentarios que aprobaron el texto en el Congreso tuvieron como objetivo ni propósito que se rebajara la pena a ningún agresor sexual. Ha recordado además que la legislación surgió de una reivindicación feminista para que cualquier agresión sexual fuese perseguida "sin culpabilizar nunca más a las víctimas y siempre al agresor" y poniendo el consentimiento en el centro.
Sánchez ha destacado el compromiso histórico del PSOE con el movimiento feminista subrayando que los avances en igualdad y en los derechos de las mujeres siempre han llevado la firma del PSOE. Ha citado la ley del aborto que está discutiendo esta semana el Tribunal Constitucional tras el recurso presentado por el PP. Ha reivindicado además que la agenda feminista ha impregnado toda la acción del Gobierno recuperando derechos "cercenados" durante los años del PP.