El Rey Felipe VI empezó su discurso de Navidad de 2022 acordándose de la Guerra de Ucrania, cuyos habitantes viven la Navidad en búnkeres, sin luz, con frío pero con esperanza. Y mucha de ella se debe a Europa y su ayuda. Y a la OTAN, cuyo valor tampoco ha olvidado el rey. Recordando de pasada el covid, protagonista del pasado discurso navideño, Felipe VI ha recordado que " en el mes de febrero Rusia invadió Ucrania y, desde entonces, hemos sido testigos de 10 meses de una guerra que ya ha causado un nivel de destrucción y ruina difíciles de imaginar en nuestra realidad cotidiana".
El rey ha recordado cómo el pueblo español ha "vivido el sufrimiento del pueblo ucraniano y seguimos sintiendo, con una profunda tristeza, la pérdida de miles de vidas humanas. Sin olvidar a los ucranianos refugiados en nuestro país. El rey ha querido realizar que la guerra está a las puertas de nuestra casa, algo que nos parecía increíble hace pocas fechas. Porque como la democracia que disfrutamos nada se puede dar por hecho y logrado. Los ucranianos lo saben, volviendo a vivir bombardeos diarios. "Estamos así, ante una nueva guerra en Europa, en las fronteras de algunos de nuestros socios europeos y aliados, y, por tanto, cerca de nosotros; y que no solo afecta a Ucrania, sino que tiene una trascendencia global".
El rey Felipe VI ha destacado el trascendental papel de la OTAN. "nuestra seguridad también se ha visto afectada. España, además de reforzar con nuestros aliados la capacidad de defensa colectiva, se ha unido a la inmensa mayoría de la comunidad internacional para apoyar a Ucrania". No solo eso.
El rey ha puesto encima de la mesa algo que en España a veces se olvida, "que la soberanía, la integridad territorial y la independencia de los Estados son principios irrenunciables de un Orden Internacional basado en reglas y que siempre debe buscar la paz".